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El Madrid tuvo un partido de lo más complicado y accidentado ante un combativo Eibar que lo dio todo hasta que se quedó sin aliento. Los de Zidane lo pasaron mal durante algunos minutos y en la primera parte tuvieron que hacer un cambio obligado, el de Varane, que se marchó del terreno de juego para dar entrada a Nacho.

Y es que el central francés tuvo un fuerte choque con Kike García a la salida de un córner y el madridista fue el que peor parado salió. Varane despejó la pelota de cabeza pero el jugador rival luego llegó tarde y le dio un cabezazo involuntario justo encima de la ceja derecha. La imagen del jugador con un chichón encima del ojo lo decía todo.

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Tras varios minutos probándose, al final el defensor acabó pidiendo el cambio y una vez acabado el partido explicó en las redes sociales el por qué de esa decisión. "Quería darlo todo para mi equipo pero cuando ya no se ve bien la pelota es hora de salir", confesó.

Lo cierto es que Varane no fue el único central que se tuvo que ausentar en el Real Madrid. En la segunda parte, el capitán Sergio Ramos se marchó rápidamente en medio del partido por el túnel de vestuarios pero acabó regresando a los pocos minutos. Zidane explicó en la rueda de prensa posterior al choque que el de Camas está atravesando algún tipo de proceso viral que le afectó al estómago, por lo que no le quedó más remedio que buscar un retrete.