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La Selección Argentina comandada por Jorge Sampaoli y con el liderazgo de Lionel Messi se prepara para afrontar un compromiso más que importante: el Mundial de Rusia 2018.

Antes del partido del debut ante Islandia, el 16 de junio, el combinado nacional afrontará un último amistoso preparatorio: será frente a Israel en su país, el 9 de ese mes en el Teddy Kollek Stadium de Jerusalem.

Sin embargo, y cuando parecía reinar la tranquilidad, surgió una declaración que no cayó para nada bien, ya que el presidente de la Federación Palestina de Fútbol, Jibril Rajoub, amenazó al mejor jugador del mundo para que no juegue dicho encuentro, por la rivalidad entre religiones.

"Es un gran símbolo, así que vamos a atacarlo personalmente y pedimos a todos que quemen su imagen y su camisa, y que lo abandonen. Todavía esperamos que Messi no venga", disparó según la agencia internacional Reuters.

El escrito fue entregado al representante de Argentina en Ramallah, y está dirigido al Gobierno y Federación de nuestro país. "El gobierno israelí ha convertido un partido deportivo regular en una herramienta política", añadió.

Por último, volvió a poner el foco sobre Messi: "Tiene muchos aficionados en los países árabes y musulmanes, en caso de no cumplirlo les pediremos a todos que quemen las camisas a su nombre y sus carteles", finalizó.