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El delantero francés quiere tener decidido su futuro antes de que comience el Mundial, y en el Atlético de Madrid tienen que ponerse a trabar a contrarreloj para satisfacer los deseos de su estrella y poder retenerle para la próxima temporada.


Cuando todo parecía indicar que Antoine Griezmann sería jugador del FC Barcelona para la próxima temporada la historia ha dado un giro, pues el jugador francés está meditando continuar en el Atlético de Madrid. Desde el club rojiblanco le han presentado una oferta de 23 millones de euros, pero eso parece que es insuficiente para el francés que he puesto una nueva condición para quedarse.

En el último partido de LaLiga Santander, Andrea Berta y Miguel Ángel Gil Marín, además de hacerle esa oferta económica, le prometieron a Griezmann que construirían un equipo ganador, y eso es precisamente a lo que está esperando el francés, a los nuevos refuerzos.

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Uno de los principales objetivos del Atlético de Madrid sería la incorporación de Thomas Lemar. Con el jugador del Mónaco en el Wanda Metroplitano las posibilidades de que Griezmann siguiese la próxima temporada en el Atleti se incrementarían. Por ello desde el club están haciendo todo lo posible para acelerar el fichaje del futbolista del Mónaco, que está dispuesto a dejar salir al jugador por una cantidad superior a los 50 millones de euros.

En caso que desde el club no sean capaces de traer refuerzos de nivel el futuro de Griezmann se teñiría cada vez más de azulgrana. El francés dijo que quería tener tomada la decisión sobre su futuro antes de que comenzase el Mundial y la cita de Rusia está cada vez más cerca. El tiempo corre en contra de Griezmann y sobretodo en contra del Atleti si quieren garantizarle al francés un equipo que pelé por todos los títulos la próxima temporada.

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