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Otro mercado de verano convulso ha terminado para Guillermo Ochoa. Y nuevamente, el arquero mexicano se ha quedado a punto de ir a un protagonista del fútbol europeo. El Nápoles lo buscó pero después de diversas negociaciones con su club, el Standard Lieja, el fichaje no se realizó. Jorge Berlanga, representante del jugador, confesó cómo sucedió todo.

De acuerdo a Berlanga, el hecho de que Ochoa no contara con pasaporte de extracomunitario le jugó una mala pasada, además de que el presidente del club belga decidió no dejarlo partir:


"Hubo una oferta del Nápoles y el presidente del Standard no lo dejó salir. Es cierto que ser portero es una posición complicadísima, él ocupa plaza de extranjero y es un condición en contra. En verano apostamos por ir a Nápoles, parecía una operación viable y al final el presidente no lo dejó irse, esa es la explicación", declaró en entrevista con El Chiringuito

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Por su sobrecupo de arqueros, el Napolés planteó un préstamo con opción de compra, a lo que el mandamás del Lieja no aceptó:


"El Nápoles tenía limitantes porque tiene muchos porteros y quería hacer la operación con un préstamo con opción obligada y el presidente no accedió", comentó. 

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De igual forma, Berlanga dio a conocer que Ochoa recibió otras ofertas del Viejo Continente pero de equipos de menor envergadura, lo que les dejó la sensación de que se perdió una oportunidad importante en este mercado:


"Sobre las otras ofertas, creímos que no era el momento para ir a otras ligas a pelear abajo porque a los porteros eso los penaliza mucho, al final está jugando Europa League, pero nos quedamos con la sensación de que era el verano para salir", dijo. 

Al final, el Nápoles terminó fichando a David Ospina - que sí posee pasaporte extracomunitario - y Ochoa, a sus 33 años, se quedó en la Liga Belga a cumplir su contrato con el Lieja.