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Ha pasado algo más de un año desde que Neymar dejó en Barcelona los 222 millones de su cláusula de rescisión, pero el fichaje aún sigue coleando según la última información recogida por Marca.

Al parecer, el Barça habría pagado la nada despreciable cantidad de 6,6 millones de euros a André Cury, empleado del club, por el traspaso del jugador brasileño. ¿El motivo? Cury tenía firmado con el club una comisión del 3% de un posible traspaso del jugador brasileño con el anterior presidente, Sandro Rosell.


Según la noticia, el Barça se habría resistido a pagar cantidad alguna a su empleado, argumentando que el jugador se fue contra la voluntad del club, abonando su cláusula de rescisión, sin embargo, el club ha accedido finalmente pagar los 6,6 millones.

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Cury además de empleado del club - trabaja como ejecutivo de la secretaría técnica para las operaciones en el mercado sudamericano - era una de las personas de confianza del padre de Neymar y acordó la comisión en 2013, año en el que llegó el jugador al Barça. Sin embargo, las últimas informaciones desde medios afines al Barça afirman que Cury niega haber cobrado comisión alguna por el traspaso de Neymar al PSG.