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El silbante Adalid Maganda confesó que puso un ultimátum a la Federación Mexicana de Fútbol para que el próximo martes 27 de noviembre acepten sus términos y vuelva a dirigir un partido de la Liga MX o de lo contrario empezará una huelga de hambre a las afueras del máximo organismo del balompié azteca. 

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En declaraciones al diario El Universal, el árbitro de 34 años de edad dio un ultimátum a la FMF, luego de acudir a la Junta de Conciliación y Arbitraje con los abogados de la Femexfut, donde le ofrecieron devolverle su trabajo en la Comisión de Arbitraje pero en categorías Sub-20; a lo cual se negó rotundamente.

“Ellos querían que volviera en divisiones inferiores y es algo que es inaceptable, mi propuesta es volver pero en la Liga MX, no tengo porqué dar pasos atrás”, apuntó Maganda.

Es importante mencionar que el originario de Guerrero colocó una denuncia por despido injustificado por parte del titular de los colegiados de la FMF, Arturo Brizio, destacando que se debió a un tema de racismo y no de capacidad, por lo que que interpuso una demanda ante la Conapred (Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación) y con la Junta de Conciliación y Arbitraje.