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David McNamara, árbitro que dirigió el encuentro de fútbol femenino entre el Manchester City y Reading, olvidó en el vestuario la moneda para sortear la cancha. Ante la situación, decidió llevar a cabo el sorteo de una peculiar forma.

Y es que el tradicional juego de 'piedra, papel y tijera' fue la manera en que el juez determinó qué lado correspondía a cada equipo. El encuentro se llevó a cabo el 26 de octubre y el resultado fue de 1 - 1.

Para Joanna Stimpson, gerente de arbitraje de la FA en la liga femenina, el hecho incurre en una falta de preparación: “Obviamente pensó que era lo correcto. No es defendible. Debería haber estado más preparado. Debería haber tenido una moneda pero no la tenía. Es muy poco profesional”, sentenció.

El árbitro recibió como sanción de parte de la FA, 3 partidos sin dirigir. Sin embargo, el castigo rige desde el 26 de noviembre.