Skip to main content

Me he cambiado de ciudad. La falta de amistades en este rincón del planeta, he de reconocer que me está cambiando. Mis noches han pasado de cerveza y risas a la cinefilia, aunque desconozco si esta palabra existe. Anoche, viendo una película que no nombraré, pensé en que segundas partes nunca fueron buenas. Mientras que la primera, solo os diré que con un gran papel de Elijah Wood, me encantó y me exaltó las pasiones; la segunda me repelió. Creo que muy pocas veces nada me había decepcionado tanto, ni tan siquiera mi equipo con su constante quiero y no puedo.

west-ham-v-gillingham-5d27230df9c6ec5398000097.jpg

Acto seguido, antes de ir a dormir, repasé las noticias del día y me encontré con la posibilidad de que Dani Alves siga en Europa… y regrese al FC Barcelona. No sé si será por el mal sabor de boca que me dejó lo que se supone que debía ser una buena película, pero acto seguido volví a pensar en aquello de segundas partes nunca fueron buenas. No es de mi incumbencia el futuro blaugrana, pero como buen futbolero gusto de ser director deportivo de sillón o butaca y me resisto a dejar pasar mi opinión. Dani Alves no debe volver al Barça.

El brasileño hizo a los culés soñar con sus cabalgadas por la banda y su buen humor, pero se marchó cumpliendo una etapa. Un ciclo al que no debe regresar. En el memorándum blaugrana siempre quedará un buen sabor de boca y un lateral derecho magnífico. Regresar, aún siendo MVP de la Copa América, podría hacer a muchos cambiar de opinión.

brazil-v-peru-final-copa-america-brazil-2019-5d2722ee68d60964b2000001.jpg

Además, aunque pueda regresar su gran amigo Neymar, sus últimas palabras no han debido gustar a Lionel Messi, líder, amo y señor del Camp Nou. Su vuelta podría suponer una mala etapa personal. Una decisión equivocada para romper una historia. Dani, por favor, no hagas como las productoras, deja todo cómo está.