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Mundial: Monterrey ya vive la Copa del Mundo 2026

Monterrey se prepara con visión integral para la Copa Mundial 2026. Alejandro Hütt, director del Comité Organizador local, explica cómo la ciudad avanza en infraestructura, cultura y seguridad para consolidarse como sede digna de los mejores eventos

Redacción SI México

El estadio Monterrey será un anfitrión de clase mundial para los partidos de la Copa del Mundo, estima Alejandro Hütt, presidente del Comité Organizador de Monterrey.
El estadio Monterrey será un anfitrión de clase mundial para los partidos de la Copa del Mundo, estima Alejandro Hütt, presidente del Comité Organizador de Monterrey. / Getty Images

Alejandro Hütt, director general del Comité Organizador para la Copa Mundial 2026 en Monterrey, se endereza en su silla cuando asegura que el evento más importante en la historia reciente de la ciudad no comienza con el rodar del balón tras la ceremonia de inauguración de la Copa Mundial de Futbol en Norteamérica el 11 de junio. No. “La Copa del Mundo ya inició para Monterrey”, afirma. Y no lo dice una vez como respuesta protocolaria; de hecho lo repite como mantra.

En la oficina de la FIFA en la Ciudad de México, Hütt confiesa que desde hace dos años la capital de Nuevo León ya opera como una ciudad mundialista. 

Con pruebas logísticas gracias a torneos internacionales juveniles hasta obras urbanas profundas, pasando por estrategias culturales y comerciales, Monterrey se prepara para recibir el mundo con una propuesta ambiciosa: demostrar que no sólo tiene un gran estadio, sino también el alma, la pasión y el músculo para ser sede de clase mundial.

Hütt observa a la Supercopa internacional Sub 19, organizada en verano de 2024, como algo más que un torneo amistoso. Para él fue un ensayo general. Rayados, Betis, Lazio, Inter Miami, Palmeiras y River Plate se dieron cita en la ciudad, para jugar futbol, pero para el Comité Organizador lo ocurrido en la cancha era quizá lo menos importante.


"Ese torneo nos permitió empezar a probar muchas cosas: procesos migratorios, logística de hoteles, temas de aduanas en aeropuertos, operación en el estadio... Y después vino el partido de leyendas, que no solo fue espectacular, sino que va a convertirse en un evento icónico para la ciudad. Todo eso nos ayudó a afinar áreas como seguridad, movilidad, experiencia de los aficionados”, afirma con el convencimiento de quien se juega todas sus fichas tras revisar su abanico de cartas.

Monterrey busca cambiar paradigmas

Monterrey será una de las tres sedes mexicanas, junto a Guadalajara y Ciudad de México. Pero quiere diferenciarse. Para Hütt, la Copa es una plataforma para cambiar una idea muy enclavada en la mente de muchos de quienes le visitan: que es una ciudad de negocios. “El Mundial es una oportunidad para cambiar esa imagen. Somos la segunda ciudad del país con más museos, tenemos cultura, tenemos gastronomía. Este evento nos va a permitir mostrar todo eso."

La idea del Comité Organizador es ambiciosa: desean atraer a más de dos millones de personas a su festival para aficionados durante el desarrollo de la Copa del Mundo —11 de junio a 19 de julio—. “Va a estar en Parque Fundidora. Estamos hablando de un promedio de 50 mil personas por día". estima.

Otro cambio de óptica es sacar el alma de la Copa del Mundo del estadio. En la cancha está el juego, pero el Mundial seguirá fuera del recinto, dice. Si bien define al estadio Monterrey (BBVA), sede oficial, como “una joya arquitectónica y operativa de clase mundial” —apenas cumplirá 10 años—, Hütt es enfático en que el verdadero corazón del evento está en toda la ciudad.

"FIFA dice que el corazón es el estadio, pero el alma es el Fan Festival. Para nosotros, eso será en el Parque Fundidora. Ahí es donde la gente que no tiene boleto podrá vivir el Mundial, donde estará la comunidad, donde se activará la cultura. Habrá música, arte, gastronomía y experiencias digitales".

El estadio, sin embargo, no queda al margen de la transformación. Está en plena adecuación de su cancha con el sistema vacuum and ventilation exigido por la FIFA, además de mejoras en iluminación, accesos y conectividad. Incluso el entorno urbano será renovado, de hecho, dice, ya se trabaja en conjunto con las autoridades para mejorar el aspecto de algunas colonias vecinas en temas de iluminación, pavimentación, parques y cámaras de seguridad. “Queremos dejar un legado físico, pero también social y comunitario".

La ciudad de Monterrey forma parte de una red de 16 sedes en Norteamérica. Hütt asegura que hay comunicación continua con todas, desde las sedes mexicanas como Guadalajara o CDMX, como en Estados Unidos o Vancouver y Toronto, en Canadá.

"Hemos participado en más de seis workshops con la oficina central de FIFA en Miami. Hablamos entre nosotros. Si un patrocinador quiere estar tanto en Monterrey como en Kansas City, por ejemplo, vemos cómo hacer un frente común. La colaboración entre sedes es clave", indica.

También hay trabajo conjunto entre las sedes mexicanas, aunque reconoce que la relación institucional local presenta matices.

"Sí, hay temas políticos, como en todas partes. Pero mientras más creativos seamos, mientras más propuestas claras presentemos, más fácil es alinear a los actores. Hay una mesa de trabajo activa y estamos publicando white papers sobre el legado y la visión de Monterrey. Viene uno el 11 de junio, a un año del Mundial, y otro el 14, que será la cuenta regresiva de nuestro primer partido aquí."

Seguridad, movilidad y fan experience: las claves

Monterrey trabaja en 62 áreas funcionales exigidas por FIFA. Pero hay dos temas prioritarios: movilidad y seguridad.

"Se están construyendo nuevas líneas del metro. Estamos desarrollando un sistema de Park and Ride para que la gente pueda dejar su auto en un punto y ser trasladada en transporte masivo al estadio o al Parque Fundidora."

Sobre seguridad, el enfoque está puesto más en el Fan Festival que en el estadio Monterrey. "El estadio va a tener actividad unos 15 días, pero Fundidora estará 39 días activo. Ahí está el verdadero reto. Se trabaja 24/7 con las autoridades locales, estatales y federales. Estamos diseñando protocolos, vamos a implementar el sistema Fan ID, y estamos coordinando con migración, Guardia Nacional, policía estatal y municipal."

La Copa del Mundo no solo será futbol; Hütt lo tiene claro.

"Monterrey es la segunda ciudad con más museos del país. Tenemos una vida cultural activa, el Festival Internacional Santa Lucía, la zona Macroplaza, y vamos a activar todo eso durante el Mundial. También estamos cerrando alianzas para que Monterrey sea sede del World Football Summit, con figuras como Davor Suker, que estará cuatro días con nosotros".

En cuanto a conectividad, también hay avances importantes, asegura: "Con la Secretaría de Turismo estatal y con OMA (Grupo Aeroportuario Centro Norte) hemos mejorado rutas aéreas. Ya tenemos un vuelo directo a Los Ángeles con Alaska Airlines. Queremos sumar más rutas internacionales en los próximos meses. Y en tema carretero, estamos promoviendo el uso del Puente Colombia para evitar que los turistas pasen por zonas conflictivas como Tamaulipas."

La cuenta regresiva sigue y el tiempo apremia. Pero Hütt no se muestra preocupado, sino comprometido.

"Los retos son claros: seguridad y movilidad. Pero también hay que mantener el enfoque en el legado. Monterrey va a recibir al mundo, pero lo más importante es lo que el Mundial va a dejar cuando se haya ido. Queremos una ciudad más preparada, más conectada, más reconocida y más vivible."

¿Está Monterrey lista para el Mundial? Tal vez aún no del todo. Pero algo es seguro: ya lo está viviendo. Y no piensa dejar de hacerlo.

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