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Según fuentes del club, estuvo muy cerca de sufrir una lesión más grave que podría haberlo mantenido alejado de las canchas por siete semanas. El pisotón que recibió durante el partido fue el responsable de la torcedura que provocó el esguince.

A pesar de haber intentado seguir jugando, finalmente tuvo que pedir su sustitución y recibir atención médica. Aunque se alegra de no haber sufrido una lesión más grave, lamenta la noticia de su baja para los próximos partidos. Por su parte, el Real Madrid, equipo al que pertenece Bellingham, deberá afrontar al menos tres semanas sin su participación.

Bellingham ha sufrido un esguince

Bellingham ha sufrido un esguince

La lesión ha resultado ser de grado alto y, a pesar de no haber afectado los ligamentos más graves, requiere su recuperación durante las próximas semanas. Aunque se espera que pueda regresar a tiempo para la vuelta de los octavos de la Champions League, por el momento su ausencia será notoria en las próximas fechas.