El gol también vuelve a casa: Ángel Sepúlveda ya es de Chivas

Tras la salida de Javier Hernández, el Guadalajara apuesta por Ángel Sepúlveda para ocupar el centro del ataque. Llega con presente, no con nostalgia, y con la misión clara de que su historia en Verde Valle no repita el epílogo que alguna vez representó Oribe Peralta.
Ángel Sepúlveda se suma al Guadalajara tras la salida de Javier Hernández, en un movimiento que busca goles inmediatos y rendimiento comprobado.
Ángel Sepúlveda se suma al Guadalajara tras la salida de Javier Hernández, en un movimiento que busca goles inmediatos y rendimiento comprobado. / Chivas

Hay regresos que no se anuncian con estruendo, sino con argumentos. Chivas encontró el suyo en el área. De cara al Clausura 2026, el Guadalajara abrió la puerta a un delantero que conoce el oficio, el desgaste y la responsabilidad de vivir del gol. Ángel Sepúlveda dejó atrás La Noria y volvió a vestirse de rojiblanco, esta vez con más millas en el cuerpo y más peso en la historia reciente del futbol mexicano.

A los 34 años, el ‘Cuate’ llega al Rebaño en el punto exacto donde la experiencia deja de ser pasado y se convierte en herramienta. No aterriza como promesa ni como apuesta, sino con certeza: goles, jerarquía y una lectura del juego que no se improvisa.

Sepúlveda nació en Apatzingán, Michoacán, y se formó en la cantera de Monarcas Morelia, donde debutó en 2010. Desde entonces ha recorrido el futbol mexicano como un delantero de largo aliento: Toros Neza, Atlante, Querétaro, Necaxa, Xolos y, más recientemente, Cruz Azul. En medio de ese trayecto, tuvo un primer paso fugaz por Guadalajara en 2018. Hoy regresa distinto. Más completo. Más decisivo.

Su último capítulo con Cruz Azul fue el que terminó de colocar su nombre en letras grandes. Campeón de la Concacaf en 2025, máximo goleador del torneo con nueve tantos y elegido MVP de la competición. Un delantero que apareció cuando los partidos pesaban y las áreas se cerraban. Ese rendimiento lo volvió a poner en el radar de la Selección Mexicana, con Javier Aguirre observando de cerca a un atacante que todavía compite por un lugar rumbo al Mundial.

El palmarés acompaña el discurso: Copa MX con Querétaro en 2016; Concachampions con Cruz Azul en 2025; Copa Oro y Nations League ese mismo año con el Tricolor. Pero más allá de los trofeos, Sepúlveda llega con algo que Chivas ha buscado con insistencia: un delantero que sepa jugar el partido completo, incluso cuando no toca el balón.

Porque el ‘Cuate’ no vive solo del remate. Es un nueve que se ofrece, que juega de espaldas, que descarga y vuelve a aparecer. Espigado, con presencia en el área, pero también con la técnica suficiente para asociarse y abrir espacios. Un atacante funcional para la idea de Gabriel Milito, que exige delanteros activos, capaces de participar en la construcción y resolver en el último tercio.

Los números sostienen su carrera: 401 partidos en Liga MX, más de 23 mil minutos disputados, 82 goles y 43 asistencias. Cifras que hablan de constancia, de permanencia y de una carrera construida sin atajos.

Chivas no solo sumó un refuerzo. Sumó un delantero que entiende el peso de la camiseta, la urgencia del resultado y el silencio incómodo cuando el gol no llega. Sepúlveda vuelve al Guadalajara con la misma misión de siempre, pero con más argumentos que nunca: empujar la pelota a la red cuando más se necesita.

El gol también sabe regresar. Y esta vez, lo hizo vestido de rojo y blanco. Su competencia es interna, ahí está Armando González, la Hormiga, quien es el actual campeón de goleo. Pelean la titularidad en Chivas y por un lugar en el equipo de Javier Aguirre en el Mundial de 2026.


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Mario Palafox
MARIO PALAFOX

Editor SR en Sports Illustrated México. 25 años de experiencia en medios. Ha cubierto 4 Copas del Mundo, Juegos Olímpicos, Fórmula Uno, NBA, NFL.