Por qué la elección de Bad Bunny para el medio tiempo del Super Bowl es significativa

Darle el escenario más grande del mundo a una superestrella puertorriqueña que canta mayormente en español es un hecho de gran importancia para mucha gente en el clima político y social de Estados Unidos hoy en día.
Bad Bunny estará en el medio tiempo del Super Bowl.
Bad Bunny estará en el medio tiempo del Super Bowl. / Dia Dipasupil/Getty Images

Probablemente hubo un significado más profundo en la última frase del comunicado de Bad Bunny tras anunciarse que será el encargado del espectáculo del medio tiempo del Super Bowl LX.

Siempre es complicado descifrar las palabras de otros, pero es buen ejercicio para cuando, inevitablemente, los veteranos cronistas de futbol americano en la cabina de prensa del Levi’s Stadium me pregunten: ¿qué dijo el hombre conejo? después de cada canción del setlist.

Te puede interesar: Bad Bunny, será la estrella del show del medio tiempo del Super Bowl LVIII

Solo no me pidan que explique qué significa “yo perreo sola”. No tenemos tiempo para todo eso. Pero sí lo haré para explicar por qué Jay-Z y Roc Nation eligieron a Bad Bunny y por qué la NFL aprobó finalmente que el astro global de Puerto Rico se presente. Más importante aún: hay que subrayar lo que significa tener a un artista que hace música principalmente en español en el escenario más grande que ofrecen los Estados Unidos.

“Ve y dile a tu abuela, que seremos el HALFTIME SHOW DEL SUPER BOWL”, dijo Bad Bunny para cerrar su comunicado.

En inglés: “Go tell your grandmother that we will be performing at the Super Bowl halftime show”, dijo Benito Antonio Martínez Ocasio, mejor conocido como Bad Bunny. No importa que muchas abuelas nunca hayan oído hablar de él. Y, aparentemente, todos los que nunca habían escuchado a uno de los artistas más reproducidos del planeta sintieron la necesidad de comentar en redes sociales que no tienen idea de quién es este “bunny man” que encabezará el espectáculo del medio tiempo en febrero.

Pero no me dejaré llevar por el sarcasmo, porque la presentación de Bad Bunny en el Super Bowl es importante para mucha gente, incluyéndome a mí. Mi abuela nunca ha escuchado a Bad Bunny —quizá—, pero le alegrará saber que un músico se presentará principalmente en español durante un partido de futbol americano que no le interesa. Ella, y muchas otras abuelas, entienden la importancia de que millones escuchen español en el Super Bowl.

Bad Bunny mencionó que seremos el show de medio tiempo porque la cultura latina estará fuertemente representada en el escenario más imponente. Nuestra cultura es admirada por millones, sin importar su origen. Y en este momento, los latinos y su cultura no se sienten bienvenidos en Estados Unidos, sin importar su estatus legal.

Ha sido decepcionante ver el aumento de redadas de ICE en los últimos meses, que a menudo tienen como objetivo a latinos únicamente por cómo lucen o cómo hablan. Nuestra gente tiene miedo de salir de sus casas. Teme trabajar y mantener a sus familias por miedo a ser acosada.

Muchos vecindarios vibrantes y llenos de cultura se han convertido en pueblos fantasma, especialmente en California, donde se jugará el Super Bowl el 8 de febrero en Santa Clara. Cinco años después de que la música de Bad Bunny nos hiciera bailar en casa en plena pandemia y nos devolviera las ganas de vivir, él vuelve a decirnos que está bien ser uno mismo. Sé quien eres, y oportunidades grandes, como presentarse en el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl, llegarán eventualmente.

Algunos de los sospechosos habituales que politizan todo han señalado que Bad Bunny recientemente rechazó hacer gira en EE.UU. por la preocupación ante las redadas de ICE. No voy a debatirlo, pero dejando la política de lado, aquello tuvo más que ver con proteger a su gente, la que está siendo blanco de estas deportaciones masivas. Él quiere montar un espectáculo para ellos. Quiere hacerlos sentir incluidos por una vez. De nuevo: se trata de nosotros, y no necesariamente del artista en sí o del género musical, porque eso también puede ser difícil de explicar. (En lo personal, mi favorito es Trap Bunny).

Así que no, la NFL no ve esta decisión como un movimiento político. Es un movimiento inteligente, uno que genera mucho dinero. Solo eso basta para convencer a estos dueños multimillonarios. Estoy seguro de que a ninguno le importó que Karol G se presentara en el medio tiempo del partido inaugural entre Chargers y Chiefs en Brasil. Solo les alegra que su producto se exponga a otra audiencia masiva. Se generaron millones después de que la liga y Brasil cerraran un acuerdo para llevar más partidos al país sudamericano.

No puedes llevar juegos a Irlanda, Inglaterra, Alemania y España —y hasta un partido de flag football de celebridades en Arabia Saudita con las mayores estrellas— y al mismo tiempo atender solo a la audiencia estadounidense.

La belleza de la audiencia americana es su diversidad. Tal vez no sea tan malo hacer que todos se sientan incluidos. Sobrevivimos cuando Kendrick Lamar se presentó el año pasado. O cuando Coldplay lo hizo en 2016. Y cuando Bruce Springsteen en 2009.

Bad Bunny tal vez no sea relevante para algunos, pero su origen y el tipo de música que crea sí lo son para millones en todo el mundo. Todo estará bien. Que las abuelas asientan al ritmo de la música del hombre conejo.


Published |Modified
Gilberto Manzano
GILBERTO MANZANO

Gilberto Manzano is a staff writer covering the NFL for Sports Illustrated. After starting off as a breaking news writer at NFL.com in 2014, he worked as the Raiders beat reporter for the Las Vegas Review-Journal and covered the Chargers and Rams for the Orange County Register and Los Angeles Daily News. During his time as a combat sports reporter, he was awarded best sports spot story of 2018 by the Nevada Press Association for his coverage of the Conor McGregor-Khabib Nurmagomedov post-fight brawl. Manzano, a first-generation Mexican-American with parents from Nayarit, Mexico, is the cohost of Compas on the Beat, a sports and culture show featuring Mexican-American journalists. He has been a member of the Pro Football Writers of America since 2017.