Vinicio Castilla: el ídolo popular entre bastidores

El máximo jonronero mexicano en Grandes Ligas exalta el talento de Isaac Paredes, celebra la eclosión de Jonathan Aranda y rememora sus años dorados en Colorado.
Vinicio Castilla durante la gala del centenario de la LMB.
Vinicio Castilla durante la gala del centenario de la LMB. / Foto: Cortesía LMB.


En cada comparecencia pública y privada, al oaxaqueño Vinicio Castilla lo distinguen dos cosas: su aura de leyenda y la postura casi marcial del que hizo de sus anchos hombros un activo competitivo durante casi dos décadas.

Sus proezas en Coors Field, un paraíso de bateo arquetípico en Grandes Ligas, lo han convertido en una referencia obligada en cada sobremesa beisbolera. Su magnetismo, en ídolo popular.

A ojos de la prensa especializada, sus récords cargan, indefectiblemente, con una nota al pie de página: haber jugado en la altura de Colorado. Sin embargo, sus 320 cuadrangulares de por vida lo mantienen como el máximo jonronero mexicano en el mejor beisbol del mundo.

La cifra, otrora inalcanzable incluso para Adrián González (317), hoy parece doblarse, tímidamente, ante el florecimiento de un sucesor legítimo: Isaac Paredes.

A finales de mayo, el antesalista hermosillense de los Astros pegó el cuadrangular 80 en su hoja de servicio ligamayorista con 26 años, dos menos de los que tenía Castilla cuando cruzó ese mismo portal. Hoy ya suma 89, con los 17 que registra en 2025 enfundado en la franela de Houston. 

“Isaac (Paredes) es un muchacho con mucho talento, que domina muy bien los dos lados de la bola. Juega muy buena tercera base, calibre de Guante de Oro, y, con su bate, hoy es el mejor productor que tiene Houston”, refiere Castilla en exclusiva para Sports Illustrated sobre la actualidad de Paredes en MLB.

Te puede interesar: Isaac Paredes: ajedecrista en la esquina caliente

Cuando dice “Guante de Oro” es inevitable no percibir cierto dejo de melancolía en su rostro. Toda una generación creció cargando la derrota moral que supuso el hecho que Scott Rolen obtuviera el galardón como tercera base, en 2004, por encima de Castilla, que esa temporada registró un mejor porcentaje de fildeo (.987 contra .977) y una menor cantidad de errores (6 contra 10) que el entonces pelotero de los Cardinals. 

“Son cosas del beisbol”, responde con una mueca que podría ser interpretada de muchas maneras: desde una muestra de resignación humilde hasta una gesto de sabiduría ancestral. 

Para pasar página y no estacionarse en Isaac Paredes, Vinny suelta el nombre del tijuanense Jonathan Aranda, quien, como Paredes en su día, encontró cobijo en el prolijo método de desarrollo de talento de Kevin Cash en Tampa Bay.

Te puede interesar: Jonathan Aranda, Kevin Cash y la alquimia de los Rays

“Me siento muy contento de que Isaac Paredes y Jonathan Aranda estén jugando de la manera que lo están haciendo. Ellos solo necesitaban la oportunidad de jugar; se las brindaron y la están aprovechando al 100 por ciento”, argumenta. 

Para terminar el intercambio informal, devenido en charla de pasillo, Vinicio Castilla se sonroja cuando le hablan de su membresía vitalicia con los Bombarderos de la Calle Blake, junto a Larry Walker, Ellis Burks, Dante Bichette y Andrés Galarraga.

“Era muy divertido compartir práctica de bateo; esa gente le daba a la bola demasiado duro”, dice mientras se aleja por un estrecho corredor que antecede las puertas de un salón pletórico que, en tan solo unos minutos, se rendirá ante sus pies.


Published |Modified
Ricardo López Si
RICARDO LÓPEZ SI

Editor en Sports Illustrated México. Periodista y escritor.