Liga MX: un relato que se sigue sosteniendo en la clase alta

Este viernes, sin apenas tregua de futbol en verano, arranca el Apertura 2025 de la Liga MX.
El vigente campeón Toluca buscará revalidar su título ante varios proyectos mejorados de la clase alta que amenazan con tomar por asalto el trono.
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En lo que parece ya ser una tendencia irreversible, el futbol mexicano cada vez acentúa más la brecha de los megaproyectos, entre los que se debe incluir al Toluca, América, Cruz Azul, Monterrey y Tigres; una clase media aspiracionista, en la que podríamos ubicar a Chivas y Pumas; una clase media inmóvil, en la que cabrían Pachuca, León, Necaxa, San Luis, Tijuana, Juárez y Atlas; y una clase baja, claramente rezagada, integrada por Querétaro, Santos, Puebla y Mazatlán.
Nuevos proyectos a seguir
Hay tres proyectos con nuevo entrenador que, por diversos motivos, apuntan a dejar mucho contenido para el análisis: Monterrey, Cruz Azul y Chivas.
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Tras su estimulante etapa en San Luis y las buenas sensaciones que dejó en el Mundial de Clubes sin mucho tiempo de trabajo, el catalán Domenec Torrent tiene la consigna de crear un equipo de autor en liga.
Su carta de presentación es un modelo de juego obsesivo, que diseñará rutas para que el talento diferencial que tiene en Sergio Canales, Oliver Torres, Lucas Ocampos, Jesús Corona y Sergio Ramos logre confluir en una estructura mucho más flexible y menos rígida que sus antecesoras.
La gestión de Iván Alonso como director deportivo de Cruz Azul también invita a pensar en cosas importantes.
Luego de haber prescindido de Vicente Sánchez, pese al título de Concacaf, por incompatibilidades a nivel modelo, el equipo se entregó al contrastado método de Nicolás Larcamón.
Con los precedentes de Puebla, León y Necaxa, Larcamón ha demostrado ser un entrenador con principios y pautas de juego muy concretas, que tienen que ver con imprimir un ritmo alto con balón y sus ya clásicos marcajes al hombre.
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El otro nuevo proyecto que obliga a prestarle atención es el de Chivas, que estrena director técnico en la figura de Gabriel Milito.
Milito, otro obsesivo del método, busca convertir a Chivas en un equipo dominante a partir del balón, la gran asignatura pendiente en los últimos torneos.
Sin duda será interesante ver cómo integra a los refuerzos Richard Ledezma, Efraín Álvarez, Diego Campillo y Bryan González, todos con perfiles muy aprovechables para mejorar los momentos con balón, a la estructura del equipo.
Fichajes de verano
Quizá, a la espera de que se cierre el mercado de pases, ningún fichaje tuvo un mayor eco mediático que el del argentino Ángel Correa a Tigres.
Con 30 años y bajo el apelativo de “suplente de lujo” en la élite de Europa, Correa debería causar un gran impacto en el sistema ofensivo de Guido Pizarro.
Ya sea como segunda punta o delantero de banda, la simple presencia del exAtlético de Madrid mejora automáticamente a Tigres y le añade matices a los planes con balón de su nuevo equipo.
Del mercado local, pero en sintonía con lo de Correa, Cruz Azul añadió a su repertorio de organizadores al enganche argentino José Paradela, que sigue los pasos de Larcamón, con quien se erigió como el mejor jugador de la liga el semestre pasado con Necaxa.
El caso del galés Aaron Ramsey y Pumas debe tomarse con mayores reservas.
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Con 34 años y un exótico rol de jugador-entrenador en el Cardiff City a cuestas, Ramsey está lejos del nivel que lo llevó a ser uno de los centrocampistas más emocionantes de la Premier League con el Arsenal.
Si se pone a punto físicamente y Efraín Juárez logra confeccionarle un traje a la medida para que pueda sumar su talento desde el golpeo y la lectura de juego, podría ser un fichaje que eleve el techo de Pumas.
Además de lo de Efraín Álvarez —poseedor de una de las zurdas más privilegiadas del futbol mexicano— a Chivas, lo de Jeremy Márquez —un perfil de centrocampista que encaja de maravilla con el proyecto que ha bocetado Iván Alonso— a Cruz Azul y lo de Alexis Gutiérrez —un mediapunta interesante, pero excesivamente dependiente de su contexto— a América, hay dos contrataciones que pasaron por debajo del radar y pueden tener un impacto inmediato en sus equipos: Fernando Beltrán —un gran centrocampista en conducción— a León y el italo-brasileño Joao Pedro —una leyenda de Cagliari— a San Luis.
A la espera de que pueda haber más equipos sin grandes presupuestos que logren sumarse al apartado de candidatos desde un estilo definido, todo parece indicar que la Liga MX seguirá sosteniendo su relato en función de la clase alta.
