La vida y el fútbol: los caminos de Luka Modric y Gio Dos Santos tras empezar juntos en el Tottenham

El 2 de octubre de 2005 la Selección Mexicana Sub-17 cambiaba el destino del país al levantar por primera vez el trofeo de un Mundial venciendo a la potencia Brasil guiada por un grupo de jóvenes encabezados por Carlos Vela, Héctor Moreno, Enrique Esqueda, Giovani Dos Santos, César Villaluz, Ever Guzmán, Patricio Araujo y Omar Esparza.

En dicha escuadra había un talentoso ‘8’ que se encargó de ser uno de los pilares del grupo que estaba llamado a ser el próximo Ronaldinho y la gran promesa del balompié azteca, empezando porque desde sus inicios se formó en las categorías inferiores del Barcelona, donde llegó a sumar algunos minutos tanto enLa Ligacomo en la UEFA Champions League.

Tras hacer bien las cosas salió de España en julio del 2008 para enfundarse en la casaca del Tottenham Hotspur de la Liga Premier, donde coincidiría con el actual Balón de Oro, el croata Luka Modric, quien venía proveniente del Dinamo Zagreb de su país, pero ¿en qué momento las carreras de ambos futbolistas se distanciaron tanto?

Todo comenzó con los Spurs pues mientras el europeo se hizo indispensable en el club al jugar 160 duelos, el hijo de Zizinho, que llegaba con más reflectores por haber sido campeón del mundo y haber militado con los culés, no logró convencer en 33 cotejos y emigró al Ipswich Town de la Championship pero no se mantendría ahí porque sería transferido al Galatasaray, un año después al Racing de Santander y al siguiente año al Mallorca y finalmente al Villarreal, donde finalmente se estabilizó y se ganó el cariño de la afición.

Uno de los grandes problemas del mediocampista fue su irregularidad, su gusto por la fiesta, el alcohol, las lesiones y su inestabilidad emocional, lo cual poco a poco fue mermando su brillante trayectoria pero en el Submarino Amarillo parecía que podía revertir todo hasta que prefirió asegurar su futuro con mucho dinero al pasar al Galaxy de Los Ángeles de la MLS, a donde llegó como jugador franquicia.

Con la Selección Mexicana sucedió lo mismo, en un principio tuvo grandes chispazos y hasta donó el ‘10’ de Cuauhtémoc Blanco pero después del Mundial de Sudáfrica 2010 poco hizo con la verde salvó el tanto ante Holanda en los Octavos de Final de Brasil 2014, ya que en el proceso de Rusia 2018 muchos lo querían fuera porque entre lesiones y bajo nivel en el Galaxy había mejores elementos que él, pero al final la Femexfut impuso al colombiano Juan Carlos Osorio que lo llevaran al certamen jugando 13 minutos y pasando de noche.

Lo irónico con el medallista olímpico en Londres es que su carrera al revés sería la mejor de un futbolista azteca pues hubiera comenzado en el Galaxy, después daba el salto a Viejo Continente con el Villarreal para después pasar por Mallorca, Racing, Galatasaray, Ipswich Town hasta ser comprado por el Tottenham y así llenar el ojo del Barcelona culminando todo con un campeonato del mundo de El Tricolor frente al Scratch Du Oro.

No obstante, el club angelino actualmente busca deshacerse de él pues no le ven salvación y su alto sueldo causa problemas, así que su carrera parece haber llegado a su fin cuando hace más de diez años estaba consagrado como una joya, mientras el croata es una pieza fundamental en el Real Madrid y ha llenado sus vitrinas de varios trofeos.

El nacido en Zadar llamó la atención de los merengues tras sus actuaciones con el Tottenham y aunque llegó entre ciertas críticas con humildad, trabajo y esfuerzo fue callando a sus opositores al ser el orquestador del equipo, lo mismo que en su Selección, a la cual guió hasta la final de Rusia 2018, pero lamentablemente cayeron ante Francia.

Modric puede presumir de haber levantado tres ligas de Croacia, dos Copas y seis Supercopas, una Liga de España, una Copa del Rey, dos Supercopas, cuatro Champions League, tres Supercopas de Europa y tres Mundiales de Clubes, además de jugar una final de Copa del Mundo mientras Gio tiene una Supercopa de España, tres Copas Concacaf, el Mundial Sub-17 y la medalla de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Finalmente, la diferencia garrafal entre los dos se encuentra en el valor que tienen actualmente en Transfermarkt pues el croata vale 25 millones de euros mientras Gio apenas cuesta 2.7.

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