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Ángel Di María está considerado uno de los mejores del mundo, pero es consciente que en la Argentina todavía se lo mira de reojo por su actuación con la Selección. Sus lesiones en momentos claves lo marcaron y nunca pudo demostrar el nivel que tenía en sus clubes a la hora de jugar con la Albiceleste.

El rosarino rompió el silencio y habló de todo. Uno de los temas que tocó fue su ausencia en la final del Mundial de Brasil. "Todo el mundo me criticó, sospechó que no la quise jugar por eso de la carta que había llegado del Real Madrid, pero pese a que expliqué la situación siguieron diciendo boludeces. Es cierto que mandaron una carta: la recibí y la rompí sin leerla. Y dije: 'Acá nadie opina nada, yo estoy para jugar'. Fue una decisión de Sabella poner a los que mejor estaban, y la respeté. Si hubiésemos salido campeones, nadie hubiese dicho nada", afirmó.

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También se refirió a sus lesiones y cómo trabaja para que no se repitan. "En un momento decidí comenzar a hacer terapia por todas las críticas que recibía; sentía que estando en la Selección no era el mismo que estaba en el club. Me lesionaba y psicológicamente me mataba pensar que ya no estaba para la Selección", reveló.

Más allá de todas las problemáticas que tuvo con la Selección, afirmó que nunca pensó en retirarse, ya que es lo máximo que puede aspirar un jugador. Más allá de eso, coincidió con Mascherano sobre la posibilidad de terminar el ciclo en caso de que Argentina no gane el Mundial de Rusia.

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Por último, se refirió a Lionel Messi y cómo entiende su juego. "Siempre hay que darle una opción de pase, tratar de estar cerca suyo. Como vemos que ocurre en Barcelona, que siempre tiene una opción para poder descargar e ir a buscar. Tratar de dársela cerca del área o de tres cuartos de cancha hacia adelante, porque ahí aparece su mejor versión", concluyó.