Skip to main content

La jornada número 21 de LaLiga dio comienzo este pasado viernes con un interesante Athletic de Bilbao-Eibar que se jugó en el nuevo San Mamés y que finalmente acabó en tablas para los dos equipos. Todo ello con Laporte viviendo su último encuentro con los leones desde la grada antes de poner rumbo a Manchester para firmar por el City.

Por parte del conjunto local, el gran protagonista fue sin duda Aritz Aduriz, que volvió a convertir e igualó a Eneko Arieta como séptimo máximo goleador histórico del club rojiblanco. Y es que el ariete aprovechó un gran centro de Williams para marcar con una de sus especialidades, el remate de cabeza.

El jugador nacido en San Sebastián además dejó otro curioso detalle que no pasó desapercibido durante el partido. Y es que justo después del gol, el Athletic tuvo otra jugada en el área rival en la que el ariete cayó dentro del área pero rápidamente se levantó y negó con la mano en dirección a la grada para que no protestaran ya que no había sido penalti. Un gran gesto de deportividad que honra al jugador.

5a6c541074758f991c000002.jpeg

Aduriz también fue el encargado de dar la cara tras un resultado que no convenció a los locales, que tras este empate siguen décimos en la tabla a cinco puntos de los puestos europeos, aunque sus rivales cuentan con un partido menos. "No nos deja satisfechos, tampoco hemos estado excesivamente bien... Cuando nos ponemos por delante en casa tenemos la expectativa de ganar. Bueno, eso es cada vez que jugamos en casa. Nada, a apretar y seguir", declaró.