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Cerca del cierre de la década de los 90's, un larguirucho jugador brasileño, rayano de los 1.80 metros de altura y de piernas fulgurantes, conquistaba las canchas del fútbol mexicano con la casaquilla del América. El Negro, como le apodaron a Antonio Carlos Santos, fue figura indiscutida del linaje águila ganando hasta ocho títulos entre Copas, Ligas y certámenes internacionales.

Es por eso que Santos, bajo cualquier óptica, es visto con estatus de ídolo en el americanismo. Y por ello mismo, un grupo de hinchas azulcremas recién se le fue encima debido a una confesión que hizo por medio de las redes sociales.

Según contó en una serie de tuits, en algún momento tuvo la oportunidad de fichar por Cruz Azul, uno de los acérrimos rivales del América, y no dudó en aceptar la oferta. Luego, prosiguió, la desaprobación del entonces DT cementero, Luis Fernando Tena y la injerencia del promotor Carlos Hurtado frustraron su llegada a La Noria.

Para rematar, el Negro admitió que 'tenía el sueño de jugar en Cruz Azul por su trato en aquel entonces'. Ante la revelación, sus seguidores americanistas no escatimaron en recriminaciones y le cuestionaron como, en su rol de ídolo águila, se aventuraba a hacer esa clase de confesión.

Cabe destacar que desde que firmó con TV Azteca como comentarista, Santos se volvió uno de los críticos más ásperos del América. Ahora en el ojo público, el americanismo no le perdonó su empatía celeste.