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Se jugaba un partido entre el Hemel Hempstead y el East Thurrock en la National League South. El delantero estrella del Hemel Hempstead, Sanchez Watt cometió una falta que le árbitro entendió como amonestable y se dirigió hacia el jugador para sacarle su primera tarjeta amarilla de la noche. Para poder apuntarlo en su libreta, le preguntó su nombre, aquí es cuando sucedió la acción esperpéntica. El delantero se apellidaba Watt, que se pronuncia igual que ‘what’, es decir, ‘qué’ en inglés, el árbitro entendió que le vacilaba y decidió expulsarlo.

El colegiado le preguntó una primera vez y al escuchar el apellido del jugador se lo volvió a preguntar. Cuando esto ocurrió por tercera vez consecutiva, el árbitro pensó que no es que el jugador no le escuchara, sino que le estaba vacilando. Algo que no podía tolerar. Le sacó la tarjeta roja. El bueno de Sanchez Watt, que acababa de marcar el segundo gol de su equipo, no se creía lo que estaba pasando.

Los compañeros del equipo acudieron a ver qué había ocurrido para que su compañero fuera expulsado y consiguieron hacerle comprender que Watt era el apellido de su compañero. El árbitro entró en razón, entendió todo y suponemos que se disculparía ante el delantero y cambió el color de su tarjeta. En el Twitter del Hemel Hempstead Town no se lo creían.

Sanchez Watt es el jugador más conocido del equipo. Desde el club están muy orgullosos de tener en sus filas a un delantero que ha pertenecido a la cantera del Arsenal y ha debutado en Copa de la Liga con los gunners, jugó tres partidos e incluso marcó un gol.

Como podéis imaginar, lo ocurrido no ha tardado en hacerse viral.