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En medio del clima caldeado que vive Rusia con algunos países de Europa un hecho ayudó poco al mismo en el encuentro que su selección disputara con Francia, luego que hinchas en San Petersburgo dedicaran sonidos racistas a dos jugadores, provocando inclusive un reclamo oficial de parte del gobierno francés.

Hinchas de Francia y comunicadores de ese país que asistieron al partido fueron testigos del mal momento que tuvieron que pasar Dembélé y Paul Pogba en el encuentro, siendo objeto de gritos similares a los que realizan los chimpancés cada vez que se acercaban a las gradas de parte de fanáticos rusos.

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Ésto provocó que la ministra de Francia Laura Flessel manifestara el rechazo a esta actitud, la misma que calificó de reprochable e instó a trabajar para evitar que vuelva a suceder.

“El racismo no tiene sitio en los terrenos de fútbol. Debemos reaccionar a nivel europeo e internacional a fin de evitar que se reproduzcan esos comportamientos inadmisibles”, indicó la ministra.

La FIFA ha trabajado en Rusia para tratar de evitar cualquier tipo de incidente, por eso en la Copa Confederaciones se realizaron operativos especiales para tratar de evitar el acceso a ciertos 'Ultras', lo que esperan realizar para el Mundial.