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Luca Zidane es el tercer portero de la plantilla del Real Madrid. Hijo del actual entrenador, tiene pocas posibilidades de jugar de manera habitual con el primer equipo. Con Keylor Navas y Kiko Casilla lo tiene bastante difícil. Y más improbable resulta cuando el club está buscando un nuevo portero. Sin embargo, el joven guardameta se muestra confiado en un futuro a medio-largo plazo. 

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Durante un entrenamiento, recibe un disparo dentro del área. El portero reacciona bien, realizando una buena atajada. Sin embargo, tiene la mala suerte de que el esférico vuelve a caer en los pies del mismo rematador, que lo intenta por segunda vez. Luca, que no tiene suficiente tiempo para volver a posicionarse, reacciona más con reflejos que con la propia habilidad. Una acción de las que se aplauden en los estadios de fútbol.

Una lástima para el internacional que desde la directiva no se cuente, al menos por ahora, con su progreso. El francés, con 19 años, todavía puede progresar enormemente en los próximos años. Porque no es la primera vez que tiene una gran actuación. Tendrá que esperar su oportunidad. Actuaciones como estas, le ayudarán.