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Hace cinco años, Casemiro debutó con el Madrid. Ese primer partido, un 20 de abril, jugó ante el Betis en LaLiga como titular. Aquel partido, que finalizó con victoria madridista, marcaría un antes y un después en el centro del campo del equipo. Tres Champions, dos Supercopas de Europa, dos Mundiales de Clubes, una liga, una Copa del Rey y una Supercopa de España ha conseguido hasta ahora.

Aunque sus inicios no fueron fáciles. Pese a que, tras la cesión desde el São Paulo fue fichado, y subió desde el filial, tuvo que abandonar el club durante un año en la siguiente temporada, yendo al Porto. Y cuando volvió, se ganó la titularidad con Rafa Benítez, hasta su desustitución.

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Pero nuevamente, se le complicaría tener el puesto con la llegada de Zidane. El francés tardó un tiempo en confiar en el brasileño como opción en el pivote defensivo. Desde entonces, salvó lesión o amonestación, se ha convertido en indiscutible, junto a Luka Modric y Toni Kroos. Además de sus cualidades defensivas, también se atreve a llegar al área rival. Los siete goles y las tres asistencias lo demuestran. Y seguirá en el Madrid, por lo menos, hasta 2021.