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A lo largo de la historia del fútbol hemos visto miles de celebraciones diferentes, desde el sencillo salto alzando el puño o la carrera hacia el banquillo hasta las piruetas circenses de algunos acrobáticos jugadores. Sin embargo, todo tiene un límite y uno tiene que saber bien dónde pisa, sobre todo cuando no ves lo que hay más allá de una valla.

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Benjamin Kololli, defensa del FC Zurich, quiso celebrar su gol frente al AEK Larnaca junto a los aficionados de su equipo que se habían desplazado hasta Chipre para el primer partido de UEFA Europa League. El zaguero del conjunto suizo anotó desde el punto de penalti el gol que posteriormente supondría la victoria de su equipo y la euforia le superó.

Kololli salió del terreno de juego, saltó una primera valla publicitaria en dirección al fondo donde se encontraban los aficionados del Zurich. Y tan solo un par de metros delante de sus fans se cruzó en su camino otra valla, que el kosovar superó sin problemas. En ese instante Benjamin Kololli desapareció.

El jugador del FC Zurich cayó varios metros hacia abajo, en el foso del estadio AEK Arena – Georgios Karapatakis, ante la atenta mirada de los aficionados y de sus compañeros, que rápidamente fueron a rescatarle. Finalmente, el futbolista no sufrió daño alguno durante el percance y pudo continuar el encuentro con normalidad tras un suceso que ya es viral.

Son muchas las celebraciones de goles que acabaron mal. Por suerte, Benjamin Kololli salió ileso y no se unió a una larga lista de futbolistas que resultaron lesionados tras un desafortunado festejo. Quizá la más famosa fue la que sufrió Martín Palermo en el Ciutat de Valencia en 2001, cuando celebrando un gol se subió a un pequeño muro que cedió y la caida le provocó una doble factura de tibia y peroné que le amargó su paso por el Villarreal. Seguro que Kololli se lo piensa dos veces a partir de ahora cuando celebre sus tantos.