Skip to main content

Los tiempos se han quemado. El equipo de Julen Lopetegui ha quemado los registros y se ha quedado a las puertas de igualar la mayor sequía goleadora de la historia de los blancos. Las puertas del Santiago Bernabéu se han abierto y no precisamente las grandes.


En el lado de la torre, una puerta pequeñita de emergencia se empieza a abrir y muestra la salida. Detrás parece que espera Conte, aunque Laudrup también la mira de reojo. ¿Ha llegado el momento de que el Real Madrid despida a Lopetegui?

fbl-esp-liga-realmadrid-levante-5bcb49ee3bf4c95b08000001.jpg

El técnico hoy se ha mostrado sin ideas. Ha intentado realizar una revolución en el once dejando en el banquillo a Kroos y alineando a jugadores que no ha dado confianza como Lucas Vázquez, sin embargo el equipo no ha respondido. No ha sido hasta la llegada del titularísimo Benzema al verde que el Real Madrid ha podido ver puerta. Un equipo sin ideas que llegaba pero no era efectivo. 

Un problema que arrastran desde hace varias jornadas. No llegan, y cuando llegan se les apaga la luz antes de llegar a puerta. Otra vez la puerta como protagonista y aquellos malos pensamientos que resuenan una y otra vez en la cabeza de Lopetegui. 


¿Tiene Lopetegui la culpa de que la pelota no quiera entrar? Reconocemos que esto puede ser un cúmulo de mala suerte pero el mal hacer defensivo que mostraron hoy en el Bernabéu solo puede señalar a dos culpables, jugadores y Lopetegui.

No es la primera vez que el Real Madrid comete fallos defensivos atrás pero lo visto hoy dista mucho de un equipo que hace escasos meses ha sido campeón de Europa. Despistes defensivos y con espacios grandísimos para que los Morales, Roger y compañía jugaran con tranquilidad. Errores tácticos que evidenciaban que el partido no estaba bien trabajado… o que los jugadores no están con el entrenador.

Una cama de la que muchos ya empiezan a hablar y de la que Lopetegui ya se ha caído al suelo, como aquel niño que se le han roto los sueños y está inquieto cuando apagan la luz.

real-madrid-cf-v-levante-ud-la-liga-5bcb4a856f0e5b6429000001.jpg

De actuar hoy, la directiva podría librar a su equipo de un mal mayor. Una huida hacia delante. Despedirlo antes de un fácil partido contra el Viktoria Plzeñ en casa que el nuevo técnico aprovecharía para que su plantilla coja confianza e ir con un aire nuevo al Camp Nou. El Camp Nou, el gran miedo de todos los madridistas.

Con Lopetegui en el banquillo y el actual nivel de la plantilla resuenan aquellas palabras de Schuster de que era imposible ganar en Barcelona. Tal vez Julen debió quedarse en la selección. Tal vez todo esto solo sea una pesadilla blanca. Sus días están contados.