México tuvo un partido para el olvido frente a Argentina
Vaya partido el que se mandaron las selecciones de México y Argentina. Se esperaba un mejor juego entre ambos conjuntos. Los de la Albiceleste no pierden nada, ganaron el encuentro, a menos de la mitad de gas, sin Messi y con ausencias importantes y con autoridad en el campo. Lástima que no se puede decir lo mismo del Tri.
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Los pupilos de Ricardo Ferretti se perdieron en el césped. Nadie lució. Fueron escasas las llegadas peligrosas de gol. No hubo una idea clara de cómo jugar al futbol ante una relajada Argentina que sólo salió a ver qué se encontraba en el Mario Alberto Kempes.
Jam Media/GettyImages
Guillermo Ochoa regresó a la titularidad y una vez más se equivocó. Como es fiel su caso, realiza dos buenas atajadas para errar en las más importantes. En el gol de Funes Mori no quiso salir y terminó siendo exhibido. Sí, la defensa también coopera, pero él no cumplió su parte como arquero. No hay justificación.
Layún y Pulido simples adornos en el parado del Tuca. El Culpable, como muchos otros, ya concluyeron su ciclo en el Tricolor, por el bien del combinado nacional deben de colgar los botines. El delantero de Chivas incluso salió lesionado. Ojalá que su nombre no vuelva a aparecer nunca más en la lista de convocados, porque hay otros que sí merecen ese puesto.
Entre lo poco rescatable están Víctor Guzmán y Ángel Zaldívar. Éste último fue al que más garra se le vio entrando como cambio. Peleó balones y no se cansó de correr. El primero entró de relevo y todas las pelotas que pasaron por sus pies fueron bien distribuidas a sus compañeros.
Habrá que esperar para ver qué pasa el próximo martes en el segundo partido. Por lo pronto, este cotejo dejó en claro que México es un conjunto sin ambiciones. Una tarea complicada la que se le viene a Gerardo Martino. Ojalá que sea él quien cambie el chip en el equipo.
