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Ya lo dice el refrán, "más vale bueno conocido que lo bueno por conocer". Neymar hizo oídos sordos a esto a la hora de partir al PSG y nunca logró desplegar el nivel que había llegado tener en el FC Barcelona, su bueno conocido.

Todo son suposiciones, pero el brasileño, nada más acabar el partido contra Uruguay, fue preguntado sobre un posible regreso al Barça y el jugador se limitó a sonreír, sin decir nada, dando pie a todo tipo de conjeturas sobre un posible regreso a su ex club.

Desde el club culé no niegan esta posibilidad, que hasta hace poco era prácticamente imposible. "Si creemos que pese a la afrenta que nos hizo, debe ser él, será él", dijo Pep Segura, director deportivo del club, en La Vanguardia. Es más, entre la afición tampoco hay un sentimiento generalizado de rechazo hacia el jugador, pese a su abrupta salida el pasado verano.

Pero la rumorología podría tener su razonamiento en el papá de Neymar. De sobra es conocido que el padre del jugador es aficionado a ofrecer los servicios de su hijo a los mejores clubes de Europa, buscando un mejor contrato para Neymar. Ya lo hizo el verano pasado con el propio Barça y ha sido una maniobra habitual con el Real Madrid.

Precisamente el club presidido por Florentino Pérez lo tiene objetivo número uno para el verano que viene. Es conocida de sobra la obsesión del presidente blanco por hacerse con el brasileño y el Madrid tiene en caja dinero de sobra para acometer la operación.

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Todo dependerá, lógicamente, del PSG. Ellos serán quienes marquen las reglas a la hora de dejar salir al jugador hacia cualquier club. El precio de salida ya lo conoce todo el mundo, 222 millones de euros, lo que pagó el equipo francés por él durante el verano pasado.