Argentina tendrá en esta Copa América la gran oportunidad de cortar la sequía de 25 años sin títulos
La Copa América de Brasil 2019, que tendrá su inicio el próximo 14 de junio, es una inmejorable chance para la Selección Argentina dirigida por Lionel Scaloni de cortar una sequía que está muy cerca de cumplir 26 años.
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Parece difícil creer que uno de los combinados más galardonados en la historia del fútbol (Argentina se ubica cuarto en la tabla de máximos ganadores de Mundiales y segundo en Copas América) lleve tanto tiempo sin poder lograr un título, si bien es verdad que estuvo cerca en muchas ocasiones.
Para ser más precisos, la última vez que la Albiceleste se coronó fue en la Copa América de 1993, al mando de Alfio Basile. Para un país con tanta cultura futbolera y tan exitoso, disputar 16 torneos seguidos sin conseguir títulos y llegar al medio siglo sin festejos es un golpe muy duro, sobre todo para las nuevas generaciones.
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Así formó el conjunto del "Coco" en la final contra México: Sergio Goycochea; José Basualdo, Oscar Ruggeri, Jorge Borelli y Ricardo Altamirano; Fernando Redondo, Gustavo Zapata, Néstor Gorosito y Diego Simeone; Gabriel Batistuta y Alberto Acosta.
Como observarán, todos se encuentran en otra etapa completamente distinta de sus vidas, muchos se guiaron por la dirección técnica y otros se desligaron de la pelota.
Para que se entienda un poco más: futbolistas que hoy integran el plantel de renovación de la Selección Argentina, como Giovani Lo Celso (9/4/96), Cristian Pavón (21/1/96) y Paulo Dybala (15/11/93), aún no habían nacido cuando el combinado nacional se coronó por última vez.
Con la delegación renovada tanto en el plantel (en los últimos amistosos estuvieron presentes muchos jugadores nuevos que jamás habían tenido su chance y la merecían) como en el cuerpo técnico (Scaloni llegó como interino pero fue oficializado por su labor en aquellos compromisos), solo falta la oficialización del retorno de Lionel Messi, el mejor de todo el planeta, para tener las esperanzas renovadas y confiar en que la Copa América puede ser nuestra.
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El crack podrá armar nuevas sociedades con futbolistas jóvenes, con hambre de demostrar que serán inamovibles del seleccionado, y además hay que sumarle que los rivales que habrá en frente no atraviesan la mejor actualidad: Brasil, siempre candidato, viene de defraudar en el Mundial de Rusia al igual que Argentina, y tendrá la presión de toda su gente ya que será el anfitrión del certamen.
El grupo B de la Albiceleste parece accesible: Colombia, Paraguay y Qatar. Es cierto que en el fútbol nunca se sabe, pero hay en qué confiar: el liderazgo de Nicolás Tagliafico, la presencia de Walter Kannemann, la calidad de Lo Celso y Leandro Paredes, el hambre de Ángel Correa, la oportunidad de Mauro Icardi y Lautaro Martínez, la revancha de Paulo Dybala, el tiro del final de Lionel Messi... ¿te parece poco?
