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Los clubes españoles han echado el cierre a la temporada y abierto sus puertas, y sus chequeras, para dar salida y entrada a numerosos fichajes antes incluso del inicio de un verano que se estrena hoy. Las llegadas de caras nuevas a los diferentes equipos han movido un total de 808 millones de euros en estos últimos 22 días que llevamos de junio, lo que sitúa a LaLiga como la primera en el ranking entre las cinco grandes competiciones europeas.

El Real Madrid, por segunda temporada consecutiva, es el equipo que más ha gastado hasta el momento en incorporaciones con el objetivo de cambiar absolutamente todo lo mostrado en la ya pasada campaña. El verano pasado los blancos invirtieron 146,2 millones de euros y en las últimas tres semanas ya son 303 los que han cambiado de manos para dar la bienvenida a Militao, Hazard, Jovic, Mendy y Rodrygo.

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El FC Barcelona le sigue con las incorporaciones de Frenkie de Jong y la más que probable llegada de Antoine Griezmann, y el Atlético de Madrid entre Joao Felix y Marcos Llorente tampoco se queda corto. Los tres grandes aglutinan más del 80% del dinero invertido en caras nuevas. Tras ellos el Betis con la compra de Lo Celso, el Sevilla con Dabbur y Diego Carlos y la Real Sociedad con Portu.

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En 2012 y 2013 la competición española ingresaba más de lo que invertía y en 2017 fue el campeonato europeo que menos invirtió, pero ahora sucede totalmente lo contrario. Si este ritmo de traspasos continúa, algo que resulta francamente imposible, la suma alcanzaría los 2.354 millones de euros cuando se cerrase el mercado. La Premier League desembolsó 1.632 'kilos' en 2017 y, viendo los nombres que se manejan como futuras llegadas, no parece una locura superar dicha cifra.

La ventana estival de fichajes se saldó con 887,9 millones de euros y en este mes de junio los conjuntos españoles ya se acercan peligrosamente a esa cantidad. Seguramente el verano de 2019 se convierta pronto en el que más dinero se invirtió en fichajes de la historia del fútbol español. La reducción de la deuda y el aumento en los ingresos por las televisiones son para Javier Tebas, presidente de La Liga, los motivos principales de este disparatado aumento.