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Parece mentira, pero a día de hoy a Messi aún le quedan récords por batir. Son pocos, y quizás menores, pero siguen contando para agrandar aún más su leyenda y dejar constancia de que, el día que se vaya, le echaremos de menos todos los aficionados al fútbol.

Ayer contra Nigeria consiguió el primer gol de la selección argentina. Por fin aparecía en el Mundial, después de su apático partido contra Croacia. Además, convirtió el gol número 100 de esta Copa del Mundo. Pero la peculiaridad de su gol estuvo en el récord que consiguió, ya que se convirtió en el primer jugador en marcar en un mundial antes de los veinte años, durante sus veinte años y pasada la treintena.

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Se convirtió también en el tercer jugador argentino en marcar en tres mundiales distintos, junto con Batistuta y Maradona. Únicamente falló en Sudáfrica 2010, donde no pudo marcar. En Alemania 2006, con 19 años, marcó el primero de ellos y en Brasil 2014 marcó cuatro goles. Uno de los jugadores que se acercó a este récord tan peculiar fue Pelé, quien con 17 años ya estaba goleando en Suecia 58. Con 21 años, en Chile 62, marcó, al igual que en Inglaterra 66 con 25 años y México 70 con 29.