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La afición polaca es famosa sus enormes mosaicos y pancartas. En esta oportunidad, el club recibió una sanción de la UEFA al mostrar en uno de los partidos una pancarta antifascista. La respuesta de los aficionados no tardó en hacerse esperar en el siguiente partido donde mostraron una pancarta dirigida al organismo del fútbol europeo.

Durante el partido frente al Astena, el 2 de agosto de este año, la afición del equipo local mostró una pancarta en la que había una imagen de un soldado nazi apuntando a un niño. Abajo de esta dura imagen había un texto que decía "Durante la invasión a Varsovia, los alemanes matar 160,000 personas de las cuales miles eran niños". A la UEFA no le gustó nada la provocación de las grada y decidió multar al club por un total de 35 mil euros. El argumento del cuerpo de fútbol europeo para tal multa fue que está prohibido dar mensajes de ideologías en los campos de juego.

Todos pensaron que la historia había terminado y que tras el pago de esta multa todo iba a quedar atrás, pero la afición polaca estaba tramando algo. Durante el último partido que disputaron por la Europa League, frente al Sheriff, desplegaron otro mosaico anunciando sarcásticamente a donde iba dirigida la plata de la multa. Primero desplegaron un cartel que decía "Y los 35.000 van a..." y luego abrieron una bandera gigante con un cochino (con símbolos de euro en su atuendo) y la inscripción "UEFA" de fondo. Acompañado a esto, hubo un encendido colectivo de bengalas que nublaron de humo rojo todo el estadio.

El máximo organismo del fútbol europeo aún no ha dado respuestas a esta acción pero todo da a entender que el club deberá pagar otra deuda, probablemente más alta que la anterior.