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Este fin de semana se dio a conocer que Jesús Molina se convirtió en el último refuerzo de Chivas del Guadalajara de cara al próximo Torneo Clausura 2019, algo cuestionado por el pasado azulcrema que tiene, aparte por sus declaraciones en las que afirma que desde niño siempre fue hincha del Club América.

No obstante, 'El Linebacker' puede ser señalado y criticado por cualquiera pero con esto demuestra que es un futbolista meramente profesional, que sin importar los colores que sienta en el corazón, está consciente sobre su deber como deportista, al cual debe entregarse al cien por ciento para poder salir adelante y llevar sustento a su hogar, algo que los aficionados quizá no entiendan y por ello prefieran decir que no siente la camiseta.

Hasta el momento el medio de contención ha dividido en dos ocasiones las críticas, primero en la Sultana del Norte y ahora entre los dos rivales más grandes del país, lo cual poco le ha importado pues ha funcionado con creces en todos los equipos que ha militado siendo constante sin que los comentarios negativos lo hagan bajar de nivel o le preocupen en realidad.

Cabe recordar que el sonorense inició su carrera profesional en las filas de los Tigres UANL y tras buenas actuaciones llenó el ojo de las Águilas, donde se consolidó como uno de los mejores en su posición ganando dos ligas, sin embargo de forma extraña le dieron salida para militar con Santos Laguna, club con el cual también se coronó.

Fue entonces cuando el canterano felino hizo su primera traición pues pese a haberse formado en San Nicolás de los Garza vistió los colores del máximo rival, Rayados de Monterrey, sin inmutarse porque sabía que era un trabajo como cualquier otro, además conocía firmemente su calidad y potencial, y simplemente con buenas actuaciones fue cambiando los abucheos por aplausos, aunque sí se piensa bien podría ser una triple traición tras jugar con los tres equipos más ganadores del norte y que con el paso del tiempo han forjado una increíble rivalidad.

Ahora, el seleccionado nacional azteca tiene un nuevo reto, pues jugará con el Rebaño Sagrado después de haber revelado su corazón americanista; pero en la misma presentación hizo saber que su compromiso con el América ya quedó atrás y buscará ganarse el respeto de uno de los cuadros más ganadores y queridos de la Liga MX asegurando, quizá para quedar bien, que sus palabras de aquel entonces se dieron por la presión de los medios de comunicación y de haber llegado al Nido, escuadra de Televisa.

La realidad es que a ciertos jugadores se les podría tachar de 'Judas' pero a Molina no del todo gracias a que se formó en Tigres y que vivió muy poco tiempo en Coapa como para haberse convertido en un emblema de la institución capitalina, aparte por la forma en que fue sacado, así que tiene todo el derecho de seguir agregando más conjuntos a su currículum. Pues lo importante es mantenerse en forma y vigente dentro del balompié azteca y más aún, si tiene posibilidades de ser considerado elemento de selección.

Finalmente, el jugador de 30 años tiene un reto importante para el certamen venidero que es apoyar al Guadalajara para sacarlo de su crisis de resultados, tema porcentual y hacerlo volver a la Liguilla después de tres fracasos consecutivos y la pregunta será ¿logrará ganarse el respeto de los Chiva-hermanos?.


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