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El Huracán 2-1 Rosario Central del sábado por la tarde tuvo una lluvia de condimentos: la vuelta del "Turco" Mohamed al banco del Globo, el golazo del colombiano Roa, el festejo de Lucas Barrios con su hijo... pero la nota la dio Néstor Ortigoza, quien disputaba un partido especial por su pasado en San Lorenzo.

Corrían 36 minutos del segundo tiempo cuando al volante central del conjunto de Edgardo Bauza se le salió la cadena: sin razón alguna, le pegó un pelotazo a Walter Pérez, futbolista Quemero que había quedado en el piso tras pelear un balón cerca del lateral.

De manera inmediata, Israel Damonte corrió hacia Orti para recriminarle la acción y, lejos de arrepentirse por lo hecho, el "10" lo empujó, lo que desató la gresca entre varios futbolistas de ambos equipos. 

Allí, Ortigoza se la agarró con Federico Mancinelli, y el árbitro Jorge Baliño decidió expulsar a los dos. La salida del centrocampista del campo de juego fue de todo menos pasiva: los hinchas de Huracán no le perdonaron su actitud antideportiva y, cuando se retiraba rumbo al vestuario, lo escupieron y le tiraron de todo.

Luego del partido, el autor del gol más importante en la historia de San Lorenzo no quiso dar declaraciones. ¿Estará arrepentido por lo hecho, o seguirá pensando que eso también es parte del fútbol?