Skip to main content

Fue finalista de la Champions con el Arsenal, y ahora está en la ruina y huye de la Policía

  • Author:
  • Publish date:

El que fuera futbolista del Arsenal, Emmanuel Eboue, ha pasado de vivir en Londres rodeado de lujos a hacerlo en la más absoluta miseria. El jugador costamarfileño está pasando por un drama en la actualidad. Ha acabado arruinado, sin casa, sin sus coches y además está siendo perseguido por la Policía.

Tal y como ha revelado el propio protagonista en una entrevista a Mirror, tan mal ha acabado que incluso se le ha pasado por la cabeza el suicidio. "Hay muchos días en los que no quiero salir de la cama. Un día me quise suicidar", confesó.

5a40f38a08f1db751b000003.jpg

Y es que Eboue ha pasado por varias situaciones de lo más complicadas en los últimos tiempos. Por lo pronto, la FIFA le impuso una sanción de un año por impagos a su agente. Es por esto que el futbolista ahora echa la vista atrás y se lamenta de todo lo que ha desperdiciado y de las personas en las que ha confiado. "Después de todo lo que he pasado miro hacia atrás y pienso: ‘Eres un ingenuo. ¿Por qué no pensaste eso mejor?’ Es duro. Los problemas con la FIFA vinieron por culpa de personas que me asesoraron. Gente a la que supuestamente importo. Por su culpa me multó la FIFA", acusó.

A esto hay que unirle el divorcio al que se tuvo que enfrentar. Más allá del daño psicológico que le haya causado la ruptura, lo que más le ha causado estragos es la pérdida de casi todos sus bienes tras el juicio celebrado y cuya sentencia jugó en su contra. En este sentido, Eboue debe ceder a su ex mujer la casa que ambos compartían en Enfield, algo a lo que se ha negado. Además, ha huido de la Policía para evitar cumplir con la sentencia. "No puedo pagar el dinero de un abogado. Es mi propia casa. Sufrí para comprarla y ahora estoy asustado. No voy a vender mi ropa o lo que tenga y lucharé hasta el final porque no es justo".

5a40f371699be4940c000001.jpg

Incluso ya no le queda dinero del contrato millonario de 8 millones de euros anuales que firmó con el Galatasaray. Ahora Eboue está viviendo entre la casa que tiene que entregar y el apartamento de una amiga a la que considera como una hermana, donde cada vez que va tiene que dormir en un colchón sobre el suelo. "Esto es muy duro. El dinero que gané lo envíe a mi esposa para nuestros hijos. En Turquía gané ocho millones de euros. Envíe siete a casa", declaró.

Por si no fuera suficiente, el lateral se ha tenido que enfrentar a dos duros palos más, los fallecimientos de su abuelo Amadou Bertin y su hermano N’Dri Serge, dos de las personas más importantes en su vida. Y lleva sin poder ver a sus hijos desde el pasado mes de junio.