Skip to main content

El FC Barcelona se divirtió en el Camp Nou goleando a un Girona que acusó la valentía en el Camp Nou. Los visitantes se adelantaron primero pero los de Valverde aprovecharon los espacios y un Messi en plan estelar para resolver pronto el partido. Suárez marcó un 'hat-trick', Messi anotó otros dos y Coutinho también se sumó a la fiesta con un golazo desde fuera del área.

Valverde rotó como viene siendo habitual y colocó por primera vez juntos en el once titular a sus dos fichajes estrella de esta temporada, Coutinho y Dembélé. El resto fueron los habituales con la presencia también de Nelson Semedo en el lateral derecho.

Comenzó fuerte el Barça, pero la sorpresa saltó a los dos minutos de juego, cuando una falta de entendimiento entre Umtiti y Ter Stegen provocó que Portu le 'robara la cartera' al central y batiese a Ter Stegen.

No tardó el Barça en reaccionar con un buen ataque en el que Messi asistió a Suárez. El uruguayo no falló ante Bono aunque el portero pudo hacer más pero resbaló. Se preveía partidazo.

La nota negativa en la primera parte fue Dembélé. El francés tuvo varias acciones de ataque contra el portero rival pero la falta de confianza le jugó malas pasadas y desesperó al público del Camp Nou.

Todo lo contrario que Messi. El argentino estaba muy afectado por la muerte de su abuelo pero sacó fuerzas para hacer una primera parte perfecta con asistencia y después con dos goles de los que nos tiene acostumbrados, el primero tras dejar sentados a dos rivales y el segundo de falta directa salvando la barrera por bajo.

Aún quedaba tiempo para que el Barça metiese la directa con un gran gol de combinación y verticalidad en el que participaron Semedo, Messi, Coutinho y Suárez para empujar a gol. El ariete lleva 19 goles en Liga.

En la segunda parte se vio a un Barça más calmado y a un Girona que corrigió su presión y su línea defensiva para no salir escaldado del Camp Nou. Lo peor para el Barça fue la lesión de Piqué a no muchos días de la vuelta de Champions pero por otro lado, Coutinho al fin apareció y dejó uno de sus típicos golazos.

Hasta Dembélé dio espectáculo en el segundo tiempo. El francés cogió confianza, dejó buenos regates y al final incluso dio un pase de gol a Luis Suárez. Nada que ver con el de la primera parte.

Seis goles fueron suficientes para los de Valverde, que levantaron el pie del acelerador en los últimos minutos. Con este gran resultado los blaugranas siguen firmes en la primera plaza de LaLiga y caminan firmes hacia el título.