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Piqué ha revolucionado a los medios deportivos españoles con su artículo para The Football Players. En él revela muchas anécdotas de su vida y hace un repaso a su carrera futbolística. Desde sus inicios en el Manchester United, de los que os vamos a hablar en este artículo, hasta su grupo de Whatsapp con sus compañeros de selección del Real Madrid.

Piqué revela que él llegó “al Manchester United como un niño y salí como un hombre. Fue un tiempo muy loco para mí porque nunca antes había estado fuera de mi casa”. El futbolista estuvo hasta los 17 años en La Masía. Hizo las maletas y dejó atrás a su familia para seguir creciendo en el Manchester United, “fue un shock”.

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Piqué se quedó impresionado al estar por primera vez en el vestuario del Manchester United. Con solo 18 años “estaba sentado al lado de Ruud Van Nistelrooy, Ryan Giggs y Rio Ferdinand. Yo quería ser invisible, solo pensaba en hacer mi trabajo y pasar desapercibido”. No pudo ser. Todos estaban en silencio cuando se escuchó algo, era su móvil que estaba vibrando dentro de su bolsa de deporte, justo detrás de la cabeza de Roy Keane. El futbolista se volvió loco “mirando por todos los lados del vestuario como un maniaco”. No lo encontraba y preguntó de quién era el móvil, todos callaron. A la tercera vez, Piqué reconoció que era suyo y Keane se volvió loco. Una buena forma de empezar.

Este no fue el único problema que tuvo Piqué en Inglaterra. El futbolista tuvo que luchar contra “otro lenguaje, otra cultura y la soledad. La soledad fue la peor parte. Pasar de estar con tu familia a los 17 a estar rodeado de adultos, leyendas, Sir Alex… fue muy complicado”. El futbolista reveló que en sus primeros dos años en Inglaterra, “llegaba de los entrenamientos a las cuatro de la tarde y ya era de noche, yo me iba a mi apartamento completamente solo. Fue muy depresivo. Mi madre me llamaba y yo le mentía diciéndole que todo era genial”.

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El futbolista del Barcelona incluso estuvo cerca de dejarlo todo y volver. Le confesó a su padre que el entrenador no creía en él y que sus compañeros eran demasiados fuertes. Su padre le contestó que “puede que hoy sea malo pero tal vez el sol vuelva a salir mañana”. Esto le hizo sentir mejor.

Poco a poco empezó a entrar más en el juego, Alex Ferguson, del que afirma es uno de los entrenadores que ha tenido nunca, empezó a confiar en él y lo rotaba con Rio Ferdinand hasta que fueron a Bolton. Debía marcar a Anelka cuando pusieron un balón en el área, quiso ser agresivo pero el balón pasó flotando por encima de su cabeza, el francés controló y marcó gol. “Cuando eres un defensa joven y cometes un fallo así, el entrenador no vuelve a confiar nunca en ti”. Y así fue, Ferguson, que le prometió jugar 25 partidos, le puso solo en 12.

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Su carrera parecía caer en picado pero llegó el Barcelona, quería recuperarlo. Piqué tuvo una larga charla con Ferguson y finalmente le dejó marchar. Aunque para ello tuvo que sacrificarse. Debido a su trato con el Barcelona, Piqué no pudo disputar el partido en semifinales de Champions del Manchester United en el Camp Nou. Ferguson le explicó que un mal partido suyo podría condenarle. Se marchó del Manchester United ganando la Champions y la Premier.