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Ayer se vivió la final de vuelta de la Liguilla de fútbol mexicano, en la que se enfrentaban el Toluca y Santos Laguna, tras el partido de ida, en el que se había impuesto el equipo dirigido por Robert Siboldi por un marcador de 2 a 1.

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El estadio Nemesio Diez se vistió de gala para la ocasión, con 30 mil espectadores apoyando a sus clubes, los locales a la espera de dar vuelta a la serie, y los visitantes con la misión de confirmar lo hecho en la ida. En los primeros minutos el encuentro lo dominaban los del conjunto escarlata, jugando mejor que su rival, que sin embargo, logró sorprender y marcar a través de Julio Furch.

Con este gol se ponía la serie 3 a 1 en favor de los 'laguneros'. Sin embargo los 'diablos' seguían buscando el partido. Tanto es así, que en el minuto 37 del primer tiempo Jonathan Orozco logra desviar un remate de Ruben Sambueza que tenía destino de gol, para mantener la ventaja. El portero lagunero volvería a ser figura en el minuto 44, al despejar un disparo potente y colocado de Ríos, para ahogar la alegría escarlata. De esta manera el primer tiempo terminó con la mínima ventaja para los visitantes.

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El el entretiempo se pudo ver a Juan Carlos Osorio, el entrenador de la Selección Mexicana en los palcos, presenciando el encuentro. 

En la segunda parte del encuentro el Toluca sigue aproximándose a la portería rival, pero sin éxito. En el minuto 69 ingresa en los locales el argentino Gabriel Hauche, en reemplazo de Santiago García, y casi inmediatamente el argentino ex Racing de Avellaneda inquieta la puerta lagunera, disparando desde el punto penal apenas desviado. Pero el delantero de los diablos tendría su revancha, pues cuando el reloj marcaba los 81 minutos del encuentro, el mismo pone el 1 a 1 en el marcador, acercando al cuadro escarlata en el global y reviviendo las ilusiones de los fanáticos locales presentes en el estadio.

Tras el gol del local, los visitantes sufrirían los minutos finales del partido, tratando de perder tiempo cada que podían, jugando así con la desesperación de sus rivales. El árbitro del compromiso dictaminaría que se jugasen 5 minutos de descuento, en los que no se movería el marcador global, mismo que indicaba que al haber ganado la serie por 3-2 el conjunto norteño era el nuevo campeón del fútbol mexicano, desatando la alegría entre sus jugadores, cuerpo técnico y sus seguidores. 

De esta manera se coronaron los 'guerreros' del norte por sexta vez en su historia, igualando a Tigres y Pachuca en la cantidad de coronas de la máxima categoría del balompié mexicano, y confirmando la 'Profecía Avengers', misma que indica que cada vez que se estrena una película de la franquicia de Marvel, el club 'lagunero' festeja con un trofeo.