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El Barça apostó fuerte por Ousmane Dembélé en el mercado de fichajes de verano. Tras los ingresos que recibió el club con la marcha de Neymar, se invirtió en otro futbolista que pudiese cubrir las características del brasileño. Y el elegido fue Dembélé, quien jugaba en el Borussia Dortmund. Pese a su edad, se hizo un gran gasto para traerle, poniendo una cantidad superior a los 100 millones de euros.

Ha pasado una temporada, y, pese a que ha sobresalido por encima de los demás en los últimos partidos, no ha terminado de convencer, sobre todo por la cantidad pagada. El principal problema que ha tenido el francés han sido las lesiones, que le han imposibilitado adaptarse al estilo de juego blaugrana. Pese a que fue una apuesta de cara al futuro, no descartan escuchar ofertas si estas son lo suficientemente razonables. 

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Con la posible llegada de Griezmann, su situación en la titularidad se complicaría.Y aquí entra en escena el PSG, quien ha contratado recientemente a Thomas Tuchel. Thomas fue quien instó en la contratación del extremo para el equipo alemán. Un factor a tener en cuenta en caso de que Dembélé termine fuera del Barça. Porque, pese a que la entidad quiere que siga con ellos, la llegada del delantero colchonero podría desestabilizar la economía del equipo. Según informa Mundo Deportivo, se podría replantear las opciones del jugador si la oferta estuviese en torno a los 115 o 120 millones de euros.