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Zlatko Dalic, seleccionador croata, ha confirmado que todo el equipo balcánico donará los premios conseguidos en el mundial de Rusia 2018 a una fundación para niños de Croacia. La nada desdeñable cifra de 23 millones de euros obtenida por su selección, servirá para que todos los niños croatas que nunca han visto el mar Adriático puedan disfrutar de siete días de vacaciones en las maravillosas costas de Croacia. 

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En la carta aprovechó también para criticar con dureza a la clase política que dirige el país, a quienes pide que no hagan suyo el triunfo de la selección croata y el subcampeonato del mundo y lo utilicen como promoción política, ya que con su actuación han llevado a su nación a la miseria.

Croacia es actualmente es el tercer país más pobre de la UE con un PIB per cápita de 11.700 euros anuales, sólo empeorado por Bulgaria y Rumanía. Ello ha llevado a que millones de personas se hayan visto obligadas a abandonar el país en busca de un futuro mejor durante los últimos veinte años. El seleccionador croata aludió a los problemas de la sociedad en su país, como las dificultades de los jubilados para cubrir sus necesidades básicas, los problemas de los jóvenes para costear su educación, los niños que pasan hambre, el colapso de la sanidad o la corrupción de la judicatura, al servicio de los intereses del gran capital. Todos los jugadores de la selección croata han suscrito las palabras del técnico.