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Es una de las anécdotas más divertidas y virales de los últimos días. El protagonista es Kanté, el jugador de la eterna sonrisa que tras perder su tren hacia París (Eurostar), se encontró con unos chicos en una mezquita y le convencieron para que se vaya a cenar a casa de uno de ellos y de paso aprovechar para jugar al FIFA.

N´Golo Kanté una vez más muestra lo humilde que es al protagonizar esta divertida anécdota. Kanté como un ciudadano de a pie no rechazó la propuesta de los chicos que sin duda son los más envidiados hoy en día. El jugador francés con este gesto nos recuerda sus orígenes humildes, cuando ayudaba a sus padre a recoger la basura. Ahora su vida ha dado un giro total, pero su carisma y personalidad sigue intacta del chico que era antes de ser uno de los mejores mediocampistas del mundo.

Los jóvenes no dudaron en colgar en sus redes el especial momento que vivieron junto al francés, donde cenaron junto a él arroz con curry y para relajarse después echaron unas partidas al FIFA.

También se pusieron a ver el programa Match of the Day de la BBC en el que analizaron las jugadas y el partido completo que hizo el francés horas antes ante el Cardiff City.