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La crisis del Real Madrid va mucho más allá de Julen Lopetegui. Los madridistas buscan culpables y miran en todas las direcciones. Hacia el propio técnico, por la propuesta y los planteamientos tácticos, hacia Florentino por la mala planificación deportiva y hacia los jugadores por el poco nivel mostrado esta temporada, sobre todo los que estaban llamados a liderar el club tras la salida de Cristiano Ronaldo. Uno de los jugadores que está en el punto de mira es Gareth Bale, el galés debía ser la nueva estrella pero no ha rendido al nivel esperado.

Carlos Carpio, subdirector de Marca, ha esclarecido la trayectoria del galés con los blancos junto a unos números que le dejan en mal lugar. El periodista ha mostrado que Bale ha jugado 201 partidos y se ha perdido 103 por motivos diversos. En estos partidos, ha marcado 92 goles y repartido 62 asistencias, por lo que no marca ni tan siquiera medio gol por encuentro, tampoco produce uno por partido. Además, solo ha disputado un 54,6% de los minutos.

Gareth Bale también pudo haberse marchado este verano. El extremo no se sintió importante con Zidane y terminó molesto por su suplencia en la final de la Champions. Sin embargo, con la marcha del luso, un proyecto con él como el jugador estrella, le sedujo y decidió quedarse. No está devolviendo la confianza. Una confianza que según estos números no debería haber tenido. Pese a todo, siempre puede lanzarse una lanza a favor de Bale pues, pese a lesiones y malos partidos, ha marcado goles muy decisivos en sus cinco temporadas en el Santiago Bernabéu.