Pasión Azteca | ¿Cómo influye el público en fútbol mexicano?
En la Liga MX ya se asoma la Liguilla. Esa fase final en que el torneo parece volver a comenzar. El lugar en que, esencialmente, cualquier cosa puede pasar. El papel que juegan los hinchas de cada equipo se vuelve vital aquí ya que, algunas veces, cerrar de local o visita puede marcar la diferencia entre pasar a la siguiente ronda o no.
En México el fútbol se vive con pasión envidiable, aunque no desmedida. A decir verdad, aunque contadas, hay nóminas en que el aficionado se hace sentir. Hablamos, pues, de los dos de Monterrey, América, Pumas y quizá, Toluca y Cruz Azul, máxime con su triunfal vuelta al Estadio Azteca.
En este sentido habría que hacer una mención aparte a las barras, sobre todo en los primeros cuatro clubes citados. Su colorido aporta mucho a que las llaves de Liguilla se tornen de esa intensidad única, aunque, a nivel de desarrollo del partido, es complejo determinar que su influencia sea verdaderamente determinante.
Más allá de eso, la gran ventaja que ofrece la localía en la Liga MX, al menos en fase de Liguilla, se resume al gol de visita. Gracias a esa regla, el equipo local aumenta exponencialmente sus chances si mantiene el cero en el duelo que haga de local. Su visita se vuelve más 'liviana': un gol en campo contrario se dúplica.
Claro que cada país vive la localía y el ambiente en el tablón de una manera diferente. La pasión es México es grande, pero salvo contadas ocasiones, no llega al grado demencial que en otros países de, por ejemplo, Sudamérica.
El 'peso' del hincha en la Liga MX es diferente al de otras latitudes en el mundo. A veces más, a veces menos, según cada sede y contexto de partido. Mira que jugarte una final ante un Azteca lleno sería temible para casi cualquier club del fútbol de América, aunque capaz que hacerlo en otro estadio impondría menos. Es, como todo, cuestión de enfoques.