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El jugador francés ha vuelto a estar en el centro de la polémica antes de que comenzase el partido de Liga frente al Betis, y tanto los aficionados azulgranas como el club están molestos por su actitud.

Ousmane Dembée ha vivido su particular semana negra en el FC Barcelona. El futbolista francés no acudió al entrenamiento del jueves por una gastroenteritis y no avisó a nadie del club , desde donde tardaron una hora y media en localizarle. El viernes se entrenó en el gimnasio pero Ernesto Valverde decidió no convocarle para el partido frente al Betis.

En el club azulgrana los jugadores que no son convocados para los partidos que se disputan en el Camp Un tienen la obligación de acudir al estadio para apoyar a sus compañeros, y según desveló el periodista de El Chiringuito, Ignacio Miguélez, Dembélé llegó tarde a la cita.

El partido comenzaba a las 16:15 y dos minutos antes estaba entrando en el parking, por lo que el francés se perdió el inicio del encuentro. Además, en un primer momento no se sentó en la zona del estadio reservada para los jugadores y el staff técnico, sino que se quedó en el vestuario viendo los primeros minutos por televisión.

Finalmente, Dembélé acudió a la zona asignada para ver el partido pero eso no sirvió para calmar los ánimos. Tanto en el club como la afición están empezando a perder la paciencia con el francés por su falta de compromiso y puntualidad.

Una vez finalizado el encuentro, el jugador puso rumbo a París para concentrarse con la selección francesa de cara a los próximos compromisos internacionales.

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