Skip to main content

El jugador galés es víctima de su irregularidad con el paso de las temporadas. Durante los últimos meses ha cumplido pero está teniendo muchos altibajos. Es impredecible saber cómo va a jugar el ex Tottenham y eso en un problema, siendo que estamos hablando de un futbolista del que se pretende un alto rendimiento en todos sus partidos.


Gareth Bale ha jugado 15 partidos en lo que va de curso, 14 de ellos como titular y 1 entrando desde el banquillo (la derrota ante Levante). De todos estos, ha completado 4 y jugado más de 80 minutos en 6: Lopetegui casi nunca lo dejaba completar los encuentros. Santiago Solari no está imitando esto, ya que, de los 3 partidos que lo utilizó, solo lo reemplazó en una oportunidad, cuando iba el minuto 80. El argentino ya ha igualado al ex seleccionador español en partidos donde Bale ha estado 90 minutos sobre el terreno de juego, por lo que, generalmente, tiene confianza en él de principio a fin.

real-madrid-cf-v-getafe-cf-la-liga-5be953e5ed8ce30121000001.jpg

El problema es que el de Cardiff sigue sin responder, salvo en ocasiones contadas. En LaLiga se diluyó después de un gran comienzo (3 goles y 2 asistencias en los 4 primeros envites), mientras que sí está rindiendo en Liga de Campeones, con 2 aportaciones en ambos apartados a sus 3 presencias. En competición doméstica lleva 7 contiendas sin anotar ni asistir, además de ofrecer un nivel discreto para lo que se le exige, especialmente cuando se esperaba un paso hacia adelante para cubrir la tarea que hacía Cristiano Ronaldo, algo que se delegó en el colectivo, puesto que es prácticamente imposible reemplazar su labor con una única pieza. Gareth Bale tiene una serie de problemas que se pueden resumir en tres apartados principales:

- Pases hacia adelante. El porcentaje para un jugador tan vertical, lo cual es su virtud y su defecto, es mirar hacia el ataque, algo que no se traduce en sus envíos de balón. Únicamente 115 de sus 264 pases (43'56%) en LaLiga han sido para adelantar la posición del esférico, centrando el resto en horizontal o hacia atrás. Lógicamente hay ocasiones en las que retroceder puede ser mucho más efectivo que adelantar, pero este dato sorprende especialmente en un jugador con el rol de dinamitar del juego.

fbl-eur-c1-plzen-real-madrid-5be9540ed609d3643b000001.jpg

- Ocasiones de gol creadas. Aquí es donde más se evidencia la principal carencia de Bale en competición doméstica, puesto que las 8 que ha tenido han sido en jugadas en transición, no en juego estático. Le cuesta mucho suponer un peligro en el arco rival cuando la defensa contrincante está cerrada y compacta, sin conceder espacios en los que pueda explotar su velocidad. Cuando los encuentra, sí que lo aprovecha, pero en una cifra de casi una por cada dos encuentros.

- Puntería. 3 goles ha marcado Gareth Bale en lo que llevamos de liga. Ha necesitado ejecutar 15 disparos a puerta (20% de acierto) y 22 fuera de la misma, lo cual hace un total de 37 chutes que han finalizado una acción de los 40 que ha intentado. Llama la atención también que únicamente 15 de ellos hayan sido desde fuera del área, puesto que siempre ha confiado en su lanzamiento desde la larga distancia, por los 25 dentro de la misma, de donde han llegado todas las dianas ligueras.

De este modo llegamos a la conclusión de que el de Gales no está cumpliendo con lo esperado en LaLiga, pero sí en competición continental. El Real Madrid le necesita en ambas, especialmente en la primera, dado que ocupa el sexto lugar de la tabla aunque a únicamente 4 puntos del líder. En Champions tiene buena parte de los deberes hechos en cuanto a clasificación, pero debe afrontar un choque importante en el Stadio Olimpico de Roma, donde se jugará el liderato de grupo (ambos tienen 9 puntos) ante los italianos. 

Todas las estadísticas mencionadas tienen como fuente el portal web Squawka.

¡No te olvides de seguirnos también en nuestra cuenta de Instagram, @90min_es!