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En la previa del partido que definirá la Copa Libertadores entre River y Boca en el Monumental, los hinchas Xeneizes decidieron darle el aliento final a los suyos con un entrenamiento abierto en La Bombonera, que lució totalmente colmada con más de 50.000 personas.

Todo se estaba dando en un clima de paz y fiesta, con un aliento ensordecedor para el plantel que realizaba movimientos en el centro del campo de juego, hasta que un hincha logró superar las barreras de seguridad y se metió en el mismísimo césped del mítico estadio.

Allí fue cuando se encontró con tres hombres, que no sin dificultad pudieron retenerlo, y cuando se disponían a llevárselo para afuera apareció Carlos Tevez. El "Apache" se acercó a los policías, les pidió que lo dejaran y lo llevó abrazado al lugar donde estaba el resto de los jugadores, ganándose así la ovación de todo el público.

El fanático se le tiró encima a "Wanchope" Ábila y a Nahitan Nandez, luego volvió con su protector Tevez y finalmente terminó logrando un intercambio: su gorrita por el buzo del "jugador del pueblo". 


Poco le importó tener que salir a los tumbos retenido por la seguridad, porque él ya había logrado su triunfo: cumplir su sueño y ser aplaudido por toda La Bombonera.