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Una luz empieza a brillar en el Real Madrid de Solari. Una luz que nutre al centro del campo y alimenta a todo aquel que tiene a su alrededor. Luz de juventud pero también de apellido reputado, luz cegadora que corta a sus rivales, luz de una estrella que ilumina al Santiago Bernabéu. Santiago Solari, con sus pros y sus contras, ha asumido riesgo dando oportunidades a algunos de los jóvenes olvidados. Continúa apostando por Ceballos, como hizo Lopetegui, pero ha sacado a la palestra a Marcos Llorente. El joven centrocampista que estuvo muy cerca de salir este verano se ha hecho grande con la confianza y comienza a ser vital en el centro del campo.

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Marcos Llorente fue titular en el difícil partido contra la Roma y en el encuentro de ayer contra el Valencia. En los dos tuvo un papel protagonista. No se arrugó. Imperioso en el corte, bien tácticamente, consiguió hacer olvidar a Casemiro, otro de esos jugadores que sin que nadie lo esperara se hizo amo y señor del centro del campo del Real Madrid. Su reválida fue cosecha de Zidane. Sin embargo, con Marcos Llorente sucede algo diferente. El pivote no solo corta sino que también distribuye, sueño de todo entrenador y de ese hincha madridista que tiene ganas de soñar con nuevas estrellas. Contra el Valencia, que el Real Madrid gozó de la posesión, intentó 83 pases de los que acertó 79, un 95%. Contra los romanistas, siendo menos pródigo con las asistencias, tampoco bajó de ese 90% de efectividad.

Marcos Llorente está creciendo y Solari lo sabe. El mismo entrenador ha alimentado su confianza en rueda de prensa afirmando que “Marcos ha estado a la altura en los dos grandes partidos que le tocó disputar”. Un guiño a su futuro. Dos partidos y una declaración que pueden cambiar la idea del jugador de salir en búsqueda de minutos. Unos minutos de juego que deben hacer recapacitar a Florentino Pérez y no buscar otro pivote en el mercado. Un Fede Valverde que, por el contrario, se hunde hacia la tercera posición. El emperador Marcos Llorente, la nueva estrella que brilla en el Santiago Bernabéu.