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El Atlético de Madrid no realizó un buen partido en Brujas. Los rojiblancos estuvieron faltos de ambición y hasta los minutos finales no fueron a por el gol. Han perdido el liderato del grupo, caído en manos del Borussia Dortmund.

LO BUENO: Oblak, una vez más salvó al equipo

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El esloveno sigue realizando méritos para que nadie entienda por qué no estuvo nominado en los premios de la FIFA al mejor portero del año. Se hizo gigante en su portería y apareció cuando el partido le obligó. La mejor jugada del encuentro fue una para suya a un cabezazo del rival.

LO MALO: falta de ambición

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El Atlético de Madrid salió falto de ganas, despistado. Cayó en una lucha con el Brujas por el centro del campo y apenas inquietó la meta rival. Los jugadores incluso perdían tiempo, conformándose con un empate que les colocaba segundos.

LO FEO: Simeone perdió el tiempo con el cambio de Lemar

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Lemar tuvo que ser retirado del terreno de juego aquejado de una entrada. Simeone, que ya tenía preparado un doble cambio, iba a dar entrada a Correa y a Vitolo, paró la sustitución pero no solo para esperar a saber si el francés podía seguir o no, sino también para que pudiera entrar al terreno de juego y perder tiempo con el cambio. El futbolista se marchó cojeando. Un gesto que muchos colchoneros no entenderán con empate a cero y el liderato en juego.