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Según informó el diario Olé, el día de hoy Gustavo y Guillermo Barros Schelotto tuvieron una reunión con Daniel Angelici, presidente de Boca Juniors y en ese encuentro, el "Tano" les habría dicho que no estaba interesado en extenderles el contrato, cuya finalización está fechada para el 31 de diciembre de este año.

Desde que los Xeneizes perdieron la final de la Copa libertadores frente a River, su eterno rival, el "Melli" está en el ojo del huracán y su salida es presunta. Desde el principio de la semana están sonando nombres para reemplazarlo e incluso hay quienes aseguran que los hermanos irán a Estados Unidos a dirigir el Atlanta (último campeón de la MLS), cambiando al Tata Martino, quien se sentará en el banco de la selección mexicana.

Desde que Guillermo y Gustavo llegaron a Boca, hace dos años y medio, no pudieron ganar ningún título internacional, aunque ganaron por duplicado el campeonato local. Sumado a esto, el equipo pudo mantenerse por más de un año en el primer lugar de la tabla, rompiendo marcas inéditas en el fútbol nacional. Evidentemente, para la dirigencia de Boca esto no fue argumento suficiente como para estirar el vínculo entre el club y el cuerpo técnico, y es por esto que optaron por la desvinculación.

Si bien todo está muy empañado por lo ocurrido en la última semana, Guillermo va a ser para siempre un ídolo del mundo Xeneize. Sería muy injusto que la hinchada se olvide de toda la gloria que le dio al club, tanto con el bicampeonato como con todos sus logros en su etapa de jugador. El DT se despide con la frente en alto y sale por la vuelta grande. Quizás algún día pueda volver y tomar revancha de lo que pasó.


¡Hasta luego, Mellis!