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No es ninguna novedad hablar sobre el interés del Fútbol Club Barcelona por dos de las mayores promesas del panorama futbolístico internacional: Matthijs de Ligt y Frenkie De Jong. Dos jugadores que además de compartir nacionalidad, la holandesa, comparten equipo, el Ajax de Ámsterdam, lo que complicará seriamente la llegada de ambos a Can Barça.

Aunque las relaciones entre el club blaugrana y el holandés son buenas, y es sabido por todos que el Ajax es un club vendedor, será difícil que se deshaga de sus dos jugadores con más proyección en el mismo mercado de fichajes. Seguro que los dos estarían encantados de seguir el mismo rumbo, pero tampoco parece fácil que su club les deje salir a los dos hacia Barcelona teniendo en cuenta las ofertas tan atractivas que hay sobre la mesa.

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Teniendo todo esto en cuenta, en el Barça seguramente tendrán que decidir quién de los dos es la prioridad y quien puede esperar o puede dejarse escapar. Evidentemente en Barcelona gustan, y mucho, ambos futbolistas, pero se antoja imposible la operación y ya se han abierto dos corrientes en la Ciudad Condal.

En el área deportiva dan preferencia a la defensa, y es normal viendo la situación en la que se encuentran actualmente. La lesión de Umtiti en su rodilla, de la que aún no se conoce como evolucionará, los 32 años que suma ya Piqué, y el nivel de Vermaelen, que además finaliza su contrato, dejan a Lenglet como único fijo de cara al futuro. Para ellos la llegada de De Ligt, que supondría el inicio de un relevo generacional, es la prioridad, y más teniendo en cuenta la situación de bonanza en el centro del campo culé.

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Sin embargo, en la directiva no quieren dejar escapar a De Jong. Los contactos con el entorno del jugador llevan produciéndose desde antes de verano y en el club apuestan por el como un jugador importante a corto, medio y largo plazo, un futbolista para diez años o más. Su club ha recibido sugerentes propuestas por parte de muchos equipos grandes de Europa, el PSG y el Manchester City se han fijado en él, pero el chico parece querer llegar a Barcelona, donde encuentra un estilo de su gusto y una oportunidad de oro para dar un salto de calidad.

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El centro del campo azulgrana tiene una gran cantidad de efectivos de nivel esta temporada y, pese a las posibles salidas de Denis Suárez y Rafinha, la llegada de Rabiot, posiblemente libre, sería otra pieza más que sumar en el puzzle de Valverde. Es cierto que Busquets, Rakitic y Vidal tienen ya una edad, pero si siguen rindiendo es complicado que cualquier joven les quite el puesto, y desde La Masía también hay jugadores dispuestos a tirar la puerta del primer equipo a patadas.

El tiempo va pasando y desde Can Barça desearían poder realizar las dos compras el próximo verano, pero saben que será muy difícil traerse a los dos diamantes en bruto del Johan Cruyff Arena de Amsterdam. También habría que sumar a todo esto la suma económica que querrá el Ajax por unos jugadores que se han revalorizado en esta temporada con sus actuaciones en la Champions. Lo que está claro es que al Barça no le va a salir barata esta operación, sea el jugador que sea.