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El Real Madrid debutaba en el Mundialito de Clubes contra el Kashima sabiendo que, de conseguir pasar, el Al Ain le esperaba en una final asequible. River Plate cayó eliminado en penaltis. El partido fue plácido para los blancos. Un triplete de Bale lo finiquitó antes de los sesenta minutos.

LO BUENO: el hat trick de Bale

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Gareth Bale ha recuperado confianza. El galés fue decisivo para el Real Madrid. Durante la primera parte fue de los más activos del encuentro aunque no fue hasta los minutos finales cuando abrió el marcador tras una pared perfecta con Marcelo. En la segunda mitad salió decidido a seguir sumando y se adelantó a la defensa siendo el más listo de la clase y consiguiendo el segundo. También marco el tercero antes de ser sustituido.

LO MALO: nuevo despiste defensivo

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El Real Madrid cumplió un buen partido en líneas generales pero volvió a tener problemas atrás. En los primeros minutos sufrieron en la estrategia. Con el partido ya ganado, se confiaron y concedieron un gol en contra. Marcelo falló trazando la línea del fuera de juego y los centrales no estuvieron lo suficientemente atentos para cortar el balón. Solari debe solucionarlo.

LO FEO: Asensio tuvo que retirarse lesionado

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Asensio fue el primer cambio de Solari. El argentino lo sustituyó por Bale, el protagonista de la parte buena de este artículo. Sin embargo, el mallorquín apenas tuvo tiempo de demostrar nada sobre el terreno de juego. Con menos de quince minutos jugador, tuvo que pedir el cambio. Se retiró lesionado. Casemiro, recuperado, entró en su lugar. Al menos una buena noticia para los blancos.