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Santiago Solari se marchó el pasado domingo del Villamarín con los tres puntos en el bolsillo tras un partido muy sufrido pero con la mala noticia de una nueva lesión en su plantilla. Y no una lesión cualquiera, pues se trata de Benzema, uno de los jugadores que están más en forma en el Real Madrid y un futbolista que actualmente no tiene recambio, pues Bale, Asensio y Mariano también ocupan la enfermería merengue.

En este sentido, el francés tuvo que abandonar el terreno de juego por una fractura en el dedo meñique de su mano derecha. No obstante, después de la realización de unas primeras pruebas y a falta de confirmación oficial, todo hace indicar que el delantero podría evitar el quirófano, tal y como ha informado el periodista de la Cadena COPE Miguel Ángel Díaz.

Y es que Benzema acudió a Valdebebas y después se marchó al Hospital Sanitas La Moraleja, donde se le realizaron las primeras exploraciones. Pero el club quiere asegurarse una segunda opinión y es por esto que el francés acudirá a otro especialista antes de tomar una decisión. Este podría ser Miguel del Cerro, jefe de cirugía del Hospital Beata María Ana y que ya operó a Iker Casillas de la mano en enero de 2013.

Por tanto, si se confirma que no tendrá que operarse, Benzema seguirá un tratamiento ortopédico y tratará de llegar en perfectas condiciones al próximo encuentro de Liga ante el Sevilla, donde el Madrid se juega gran parte de sus opciones en LaLiga ante un rival directo. El choque que se perderá seguro será la vuelta de Copa del Rey ante el Leganés que se celebra este miércoles.

En el peor de los casos, si Benzema no pudiera evitar finalmente la operación, causaría baja también para la visita del Sevilla al Santiago Bernabéu pero podría estar para el enfrentamiento siguiente ante el Espanyol: se estima que con una férula el futbolista podría estar apto para jugar.